l Cecilia Bastías Jerez

Dispuestos a todo, tres dirigentes sindicales de Huachipato decidieron subir a la Chimenea Nº 2 de la planta ubicada en Talcahuano, a 75 metros de altura, en forma de protesta por lo que a su juicio denuncian como prácticas antisindicales, despidos injustificados y eliminación de beneficios.

Fue de forma repentina, en una decisión que involucró sólo a las tres personas que aceptaron el desafío de permanecer por el tiempo que fuera necesario para recibir una respuesta a la pregunta que se hacen: "¿Qué pasará con Huachipato?". Así, a eso de las 21.30 horas del lunes 20 de enero, Mónica Aguilera, presidenta del Sindicato Nº 1 de Huachipato; Rodrigo Araneda, tesorero; y Eliecer Pérez, director del sindicato, subieron a la chimenea de la Batería de Coque de la planta.

"Esto fue todo de improviso, porque aquí hay una gran cantidad de guardias que custodian la empresa, ayer subimos cuando estaba oscuro a algo que no conocíamos, en realidad", indicó Eliecer Pérez, quien agregó que "es la única forma de dar a conocer lo que está haciendo esta empresa con sus trabajadores".

Además de la altura y el frío, que aumenta en esas condiciones, los manifestantes se ven expuestos a otra problemática, que es el vapor producto del agua que enfría el carbón en la planta, y que sube justo hacia donde están ubicadas estas personas, lo que pudiese desencadenar en enfermedades respiratorias.

Sin embargo, la determinación de estos tres dirigentes es tal, que incluso hablan de arriesgar aún más sus vidas, permaneciendo en este espacio por el tiempo que sea necesario para obtener la respuesta que ellos esperan. "Nosotros vamos a luchar hasta el final, y si tenemos que bajar en forma horizontal, también lo vamos a hacer por nuestros socios", indicó Rodrigo Araneda.

En tanto la presidenta sindical, Mónica Aguilera, afirmó que están dispuestos a esperar todo el tiempo requerido por una respuesta de las oficinas en Santiago de CAP, Compañía de Acero del Pacífico, porque argumentan que la respuesta que les pudiera dar la empresa Huachipato no les sería satisfactoria.

"Nosotros requerimos un compromiso de que no va a haber más despidos, ni disminución de las condiciones laborales. Nosotros tratamos de conversar muchas veces con Huachipato, pero en realidad no hemos tenido eco", aseguró Aguilera, y añadió que lo que esperan con esta protesta es que sean reintegradas las dos personas que fueron despedidas este año.

Las dificultades en las que se ha visto el sindicato en el último tiempo no son desconocidas, como señaló el propio dirigente, Eliecer Pérez, ya que "antes eran cerca de 1.400 socios y ahora quedan sólo 426".

Y las consecuencias ya parecen evidentes hasta en el exterior de las propias instalaciones de la empresa. Es así como las emblemáticas oficinas de este gremio, ubicadas en calle Barros Arana de Concepción, figuran 'En arriendo' puesto que aseguran que cada vez las fuerzas son menores para mantener las propiedades del sindicato, dentro de las cuales estaba también un predio en Quillón, y las oficinas de Talcahuano y Concepción.

"Con toda esta crisis, creemos que nos tendremos que quedar sólo con el sindicato de Talcahuano, y el de Concepción quedará en arriendo", indicó Pérez.

A lo largo de las horas que llevan en la chimenea, los dirigentes comentan que han recibido múltiples llamados con palabras de apoyo por parte de distintos movimientos gremiales, lo que da cuenta de lo convulsionada que está la situación en el cordón industrial en Talcahuano.

"Hemos recibido muchísimos llamados, nos están apoyando en el tema de comunicación y eso da muestra de que nos preocupa lo que pasa con las Industrias en Talcahuano", afirmó Mónica Aguilera.

"Hace tiempo que estamos unidos como Cordón Industrial, especialmente con los compañeros de Petrox. Nosotros hemos estado apoyando a la gente de Cerrillos, de Asmar, hemos estado con ellos y también marchado con ellos en sus manifestaciones", comentó Eliecer Pérez.

En tanto el Sindicato de Enap emitió un comunicado de apoyo a los acereros. "Respaldamos las demandas de nuestros compañeros de Huachipato, y llamamos a la administración a generar una alianza con sus trabajadores para buscar fórmulas que permitan enfrentar unidos los complejos tiempos que vive Huachipato", expresó la directiva, presidida por Paulo Pino.

Y además, hicieron un llamado a las autoridades regionales a intervenir en este conflicto. J

En un comunicado de prensa, la empresa se refirió a la situación de estos tres trabajadores: "CAP Acero informa que este lunes 20 enero, a las 22:00 horas aproximadamente, tomó conocimiento de que tres trabajadores de su dependencia subieron sin autorización a la chimenea de la Batería de Coque, encontrándose actualmente instalados sobre una plataforma ubicada a 75 metros de altura".

"En este momento los trabajadores están expuestos voluntaria e irresponsablemente a riesgos para su seguridad, en un afán por ejercer una presión inaceptable sobre la empresa, con la intención de afectar su facultad para administrar, en un momento particularmente difícil para la industria".