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Cristián Lara Landaeta tiene 47 años de edad y desde los seis que pertenece a la Asociación de Guías y Scout de Chile que el pasado 21 de mayo cumplió 106 años de vida, bajo el lema "¡Siempre Listo!". Después de cuarenta años de trabajo dentro de corporación, hoy ocupa el cargo de director regional zona del Bío-Bío.

Durante todos estos años, ha participado de tres "jamboree" internacionales ( encuentro de exploradores) en Bolivia, Chile e Inglaterra.

Fue este último viaje el que le permitió, vestido de camisa explorador y su tradicional pañolín, recorrer otros cinco países de Europa, llevando con orgullo la bandera chilena, como todo patiperro de esta la larga y angosta faja de tierra.

Vida de explorador

Cuando cumplió seis años, el pequeño Cristián Lara moría de ganas de entrar a los scouts. Primero, porque sus otros dos hermanos, Jorge y Guillermo, llegaban contando historias de aventuras y de desafíos que, a ratos, parecían sacados de El libro de La Selva.

Segundo, cansado de escucharlas, quiso vivirlas en primera persona. Esa decisión, hasta el día de hoy, fue una que lo marcaría de por vida.

Fue ahí cuando entró a los Lobatos del grupo Scout de San Ignacio de Loyola, en la actualidad instalado en San Pedro de la Paz.

"A los seis años y medio vas como pollo nuevo y ves gente nueva. Uno conoce a los amigos scout de los hermanos, pero cuando uno llega a los Lobatos, te encuentras con un mundo nuevo y lleno de desafíos", recordó sobre esos emotivos años de infancia donde el mundo se abría como una invitación para descubrir todos sus misterios.

"La acogida fue espectacular, porque te integran y esa hermandad es para toda la vida", agregó.

Luego de ser Lobato hasta los 11 años, dejó de lado El Libro de la Selva para avanzar en la jerarquía.

Fue así como pasó con mucha alegría a ser Scout o Tropero hasta los 15 años, donde el modelo a seguir fue la fe de San Jorge. Al terminar este período, se convirtió en Pionero, para seguir los pasos de San Alberto Hurtado, por todos los valores de entrega y amor al prójimo.

La última etapa fue la de ser Caminante. Ahí su máxima influencia fue San Pablo de Tarzo, como lo dicta la doctrina scout.

Todos estos rangos son los mismos que rigen hasta hoy para todos los aventureros exploradores en la actualidad.

Muchos de los que egresan se dedican a los estudios o al trabajo, según sea la decisión personal de cada uno al cumplir la mayoría de edad. Otros, optan por seguir dentro de la rama, como fue el caso de Lara.

"Todos se hacen la pregunta de si quieren seguir perteneciendo a los scout. Entonces postulan, se van capacitando, van haciendo cursos, hasta adquirir una destreza que les permita desenvolverse en un trabajo con niños", explicó.

Viajes

Fue así como, cuando tenía 25 años de edad, participó en su primer viaje al extranjero. "En el año 94 ó 95 me tocó ir a un 'jamboree' a Bolivia, que son grandes campamentos internacionales", explica.

"Nos fuimos en un bus con otro grupo scout y nos demoramos como tres días en llegar allá y tres días para regresar. Además, fue entre Navidad y Año Nuevo", recordó.

"Pasé esa Navidad en otro país y fue la primera experiencia de ese tipo. En aquella oportunidad participaron cerca de cinco mil scouts en Cochabamba, Bolivia. Así que imagínate. Fue un tremendo viaje", añadió.

El segundo "jamboree" fue en Chile, en 1999, donde participaron cerca de 180 países. "Me tocó estar a cargo de un subcampo con cerca de mil personas. Tremendo", rememora.

Su tercera excursión a tierras lejanas fue en el año 2007 cuando participó de un encuentro internacional en Inglaterra para celebrar el centenario de la fundación. "Pudimos ir a Londres, la tierra de las raíces, donde vivimos una experiencia con más de 44 mil personas, con un programa que duró quince días y donde aproveché de conocer otros países", comenta.

Fue así como recorrió el viejo continente, explorando lugares que sólo había visto en revistas y en la televisión. "Tengo fotos en Londres, Roma, París, Estocolmo y Madrid. De mi grupo fueron siete personas con harto esfuerzo y ellos se acuerdan hasta el día de hoy de esa experiencia. Es un orgullo, porque son cosas que se quedan para toda la vida", enfatiza.

anécdotas

Como todas las experiencias, viajes tanto en el extranjero, como en el propio territorio, las anécdotas no pueden faltar.

Lara recordó un hecho muy curioso. "En el jamboree internacional de Chile en el 99 me tocó tener la delegación Argentina y de Inglaterra juntos", dice.

"Fue en buena onda, en camaradería. Por el contexto histórico militar, los scout superan todo eso", sentenció.

En Estocolmo recordó que se encontró con otro compañero del cual fue padrino cuando era adolescente. " Se tuvo que ir con su familia a Suecia. Estudió allá y se recibió. En la época en que fui al 'jamboree' el estaba haciendo un doctorado en neurociencia", cuenta.

"Se llama Luís López Heredia y el me recibió una semana en su casa. Dejó de lado todo por un momento y nos hizo de guía turístico", recuerda y añade que su ex pupilo sigue siendo tan penquista como siempre.

Aún tienen contacto y está al tanto del equipo de sus amores, el Fernández Vial, llevando también la bandera chilena a todos los países que viaja, ya que como todo boy scout, ha recorrido la mitad del mundo.

"Siempre como scout o como dirigente, siempre está sembrando semillas. Para mí es un fruto constante", reflexionó.

EN FAMILIA

Es ese esa misma pasión que transmite junto a su esposa, Tania Mendoza, a quien conoció dentro del grupo scout, a sus hijas.

"Pololeamos siete años y llevamos 19 años de feliz matrimonio", comenta. Valentina, Monserrat y Fernanda, llevan para todos lados el pañolín. "Es nuestro punto de encuentro familiar, porque compartimos viajes, campamentos y muchas actividades", señala.

"En el fondo es un estilo de vida. Es una segunda piel, ya que uno nace y vive scout en todos los valores de la ley y la promesa. Eso se nota en la familia, con los amigos, con todo el mundo", asegura Lara.

Historia

Para entender qué es un Boy Scout y estar en los zapatos todo terreno de Cristian Lara, hay que remontarse a los primeros años del siglo pasado.

Fue en 1909 cuando el doctor Alcibíades Vicencio fundó la Asociación Guías y Scouts de Chile el 21 de mayo de 1909 durante la primera excursión scout en Chile en el puente Los Morros de Santiago.

Según explicó Lara, se eligió en esos años esta fecha en honor al Capitán Arturo Prat Chacón, como reflejo de uno de los grandes valores humanos: valentía, entrega por su país y sacrificio por la sociedad.

Un dato importante dentro de los exploradores, es que la primera asociación scout organizada en toda América bajo la tutela del Teniente General Robert Baden-Powell, fue en nuestro país. "En el 'jamboree' del centenario, en el año 2007 en Inglaterra, estaba la bandera del Reino Unido y después la de Chile", recordó con orgullo.

"Tenemos una tradición que es fantástica. Todos los países nos miran y dicen: Chile tiene un lugar importante", finaliza el boy scout, Cristián Lara. J