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Vicente Castro aún se ríe cuando ve el video del ladrón que se robó una olla de 80 litros desde su local la semana pasada, en el centro penquista. Aunque le duele la pérdida, se mata de la risa por lo insólito y chanta que habría sido el mechero al llevarse el enorme fondo de acero. Las mismas imágenes se hicieron famosas en todo Chile gracias a Internet, en donde el hecho fue sinónimo de burlas por lo irrisorio del delito.
Fue la misma fama que alcanzó el caso, la que permitió que la olla apareciera. Desde ayer, el objeto ocupa un lugar privilegiado en la tienda de Castellón con Maipú, en Concepción. Vicente, el dueño, la dejó en lo más alto y la acompañó con recortes de prensa, como un objeto de culto. "Esta es mejor que la Champions", cuenta antes de explicar cómo apareció.
El locatario recordó que el jueves, el día del robo, "estaba lloviendo cuando él entró. Estábamos atendiendo a un curita. En menos de un minuto se robó el fondo y el paraguas del cliente. No alcanzamos a seguirlo y sólo el lunes supimos lo que pasó después".
Hubo otra olla antes
Castro añadió que el tipo, antes de ir a su negocio, "había atacado en otra tienda que vendía ollas. Se llevó una grande también, desde un local junto al Mercado. Nos enteramos que los dueños, lo encontraron después en la calle y le quitaron el fondo, pero cuando lo vieron, se dieron cuenta que no era el suyo. Era otro, el nuestro".
El segundo comerciante afectado guardó la especie y sólo cuando vio las noticias y los diarios, entendió que era la olla de ochenta litros que le habían quitado a Vicente Castro. "Él fue bien noble porque llegó al local con los diarios y la olla para devolvérmela. Me contó que todavía andaba buscando la suya", añadió.
Según averiguó el dueño de la tienda, "este tipo, dicen, anda bien seguido por el centro. Algunas personas me dijeron que lo vieron tratando de vender las ollas en locales de comida del centro, pero nadie le compró". "Estos fondos no son los que usan en casas. Los usan, más que nada, en restaurantes y en cocinerías", añadió el comerciante penquista. J