Carlos Paz Durán

No ha parado. Luego de llegar la noche del domingo a la casa de sus padres en la Población Peñuelas 1 de Hualpén, de ser recibido por decenas de personas a las que saludó desde el balcón y a las que regaló camisetas y balones, Gonzalo Jara tuvo ayer un día casi tan intenso como los que vivió con la Roja en Copa América.

"Sí, ha tenido un lunes muy movido", señaló su cuñada Carol Seguel en el ingreso de la casa que los Jara Reyes tienen hace años en calle Munich, para luego añadir que "ahora no está. Anda donde un sobrino. Se lo ha pasado entrando y saliendo todo el día".

Una de las primeras de esas salidas fue a Huachipato, club en que se formó y donde compartió, entre otros, con el PF Miguel Ochipinti y los técnicos Carlos Felipe Pedemonte y Alejandro Padilla, quienes lo dirigieron durante sus años en el Fútbol Joven.

"Nos alegró mucho verlo llegar al estadio para compartir con nosotros", señaló Padilla, quien añadió que "es una muestra más de su humildad y de lo mucho que quiere al club que lo vio nacer, del que jamás se olvida".

Al tiempo que el defensor visitaba a sus conocidos, la casa paterna que lo aloja fue el centro de una larga procesión de niños y adultos que querían saludarlo, o que buscaban su autógrafo escrito en una camiseta, gorro o pelota de la Roja.

Como la inmensa mayoría no lo encontró, la opción fue dejar en el lugar el objeto a autografiar.

"Pasen más tarde a buscarlo, y no se preocupen, pues va a estar con la firma de Gonzalo", aseguraba a unos y a otros la cuñada.

Una de esas personas fue Rosa Soto, quien llegó con su retoño en brazos.

"Dejé una polera, un peluche y un lápiz. Como a las 18.30 horas los voy a pasar a buscar", señaló la dama, quien adicionó que "estoy contentísima por el título que la selección y Jara atraparon en la Copa (América)".

Aún con el uniforme del Colegio Gran Bretaña, las compañeras de sexto A Eymi Fonseca, Javiera Morales y Esperanza Pastene también tocaron la puerta del hogar en que creció el número 18 del "equipo de todos".

"Aquí nunca pasa algo, por lo que tener a alguien que creció en el barrio como campeón de América es impresionante", dijo Javiera.

"Traje una camiseta. Quiero que Jara escriba mi nombre en ella. Sería fantástico", expresó Esperanza.

"También quiero su firma, pero en mi brazo", manifestó Javiera.

muni e intendencia

Aparte de los fans y la prensa, las autoridades también llegaron a la vivienda de los Jara Reyes para intentar fijar una reunión de reconocimiento con el crack de la familia.

"Fuimos donde sus padres, pero no lo encontramos. Por ahora desistimos del intento", afirmaron desde la alcaldía hualpenina.

Intendencia, en cambio, aún no se da por vencida. Pero tiene poco tiempo para "amarrar" la cita, pues el jugador, que dispone de 15 días de descanso, parte mañana de vacaciones. J

"Ha tenido un día muy movido. Se lo ha pasado entrando y saliendo",

Carol Seguel, cuñada de Jara