Juan Fariña López

Bien tempranito durante la jornada de ayer, las mellizas Melita y Antonia Abraham, oriundas de San Pedro de la Paz, consiguieron en Toronto la medalla de plata en la final femenina de los dos remos largos, en sus primeros Juegos Panamericanos. La competencia se realizó en aguas cercanas a las Cataratas del Niágara, en la frontera entre Estados Unidos y Canadá, donde las hermanas tuvieron un espectacular debut.

Su tiempo en los 2000 metros fue de 7 minutos, 32 segundos y 77 milésimas, a casi 17 segundos de la dupla de las norteamericanas Emily Huelskamp y Molly Bruggeman, ganadoras del oro y favoritas en la previa. Además, el bronce quedó en manos de Canadá, mientras que Argentina y Cuba alcanzaron el cuarto y quinto lugar respectivamente.

siempre atenta

La hazaña de las Abraham, que de paso obtuvieron la primera medalla para la Región del Bío Bío y la quinta para Chile, fue seguida lo más cerca posible por sus familiares en la zona. Su madre, Melita Schüssler, se enteró rápidamente del resultado de la competencia vía internet, ya que por más que buscó ningún canal trasmitió la carrera de las chiquillas en directo, lo que ella hubiese preferido.

"Los medios en la tele no trasmitieron la competencia del remo, en el CDO estaban dando el vóleibol. Me enteré de los resultados viendo los tiempos por la página oficial de los juegos", indicó Melita, agregando que "estoy muy feliz y orgullosa. En lo personal esperaba un tercer lugar porque ellas tenían como objetivo conseguir el podio. Lo bueno es que pudieron superarse y vencieron a las canadienses, que habían salido primeras en las clasificatorias".

Sobre su aporte al éxito deportivo de las mellizas, la madre sostuvo que "el apoyo incondicional es fundamental, tanto en lo económico como emocional. Hay que aperrarles en todo, acompañarlos a las competencias y disfrutar con ellos de sus carreras en las buenas y en las malas. A veces tuvimos que correr de médico en médico, pero por suerte acá en Concepción hay muchos amigos kinesiólogos que las apoyan harto".

Pese a que sólo había trascurrido un par de horas desde la obtención de la medalla de plata, la gente ya felicitaba a Melita en la Panadería Dresden y los llamados no pararon durante el día.

ligados al remo

De los comienzos de las mellizas en el mundo del remo, Melita recordó que "ellas empezaron a los 10 años, cuando un día cualquiera las invitaron a remar junto a mis otros dos hijos. Al final se terminaron entusiasmando todos con el tema y han seguido hasta el día de hoy sin parar. Ellas se levantan temprano y entrenan de lunes a lunes dos veces al día".

Respecto a lo complejo que es tener hijas deportistas de alto rendimiento, la chocha madre reconoció que "no es fácil, porque se siente el nido vacío después de pasar 17 años con la casa llena de ruidos, desorden, risas y llantos. Ahora con mi marido estamos solos casi todo el año, porque entrenan la mayor parte del tiempo en la laguna Curauma".

El último desafío para las mellizas Abraham en estos Panamericanos será participar mañana en la final de remo cuádruple junto a la también sampedrina Josefa Vila y la valdiviana Soraya Jadue. Los rivales son fuertes pero las sorpresas existen y bien lo saben las Abraham. J

Sobre su participación en la prueba de 2000 metros, donde ganaron con su hermana la medalla de plata, Melita Abraham sostuvo que "estamos muy felices por el trabajo realizado junto a nuestro entrenador Bienvenido Front. Ha hecho un trabajo muy importante y hemos tenido mucho apoyo para nuestra preparación. Eso es algo que hay que resaltar porque nos facilita mucho nuestro proceso de entrenamiento". Por su parte, Antonia manifestó que "es el logro más importante de nuestra carrera".

Las hermanas Abraham mañana compiten en la final de remo cuádruple para concluir su primer panamericano.