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Con llaves y movimientos rápidos, al más puro estilo de las peleas de la UFC, los vecinos de Lomas Coloradas buscan frenar la delincuencia de la que acusar estar siendo víctimas. En varias oportunidades les ha tocado protagonizar detenciones ciudadanas en el barrio, por lo que aseguraron a Carabineros que necesitaban aprender cómo defenderse. En la Sexta Comisaría acogieron la petición y comenzaron un entrenamiento de Artes Marciales Mixtas.

más seguros

Las primeras clases han sido duras y aunque andan un poco machucados, dicen estar contentos, porque es algo que buscaban desde hace tiempo. Audolina Peña, vecina del sector, contó que "para nosotras las mujeres el riesgo de un asalto es más grande, porque nos pueden ver como un blanco fácil. Entonces, andamos con miedo y siempre mirando hacia atrás en la calle. Pero entrenando una se siente más segura".

Sus instructores forman parte del Modelo de Integración Carabineros-Comunidad (Micc), quienes constantemente realizan labores preventivas contra la delincuencia en San Pedro de la Paz. Para ellos, es fundamental que los vecinos sepan que una pelea es el último recurso y que todos los conocimientos que se les entregan sólo buscan frenar o someter al delincuente, pero no dañarlos más de lo necesario.

No fomentan golpes

El sargento Cristian Castro explicó que "durante una retención ciudadana, muchas veces el exceso de golpes transforma a las víctimas en victimarios y, finalmente es el delincuente quien demanda a los vecinos. Por eso se les está enseñando otras formas de contenerlos hasta la llegada de personal de la comisaría".

El instructor es el sargento Víctor Cerna, quien es además cinturón negro primer Dan de la disciplina Daido-Juku Kudo, que mezcla estilos de lucha como el box, judo, muay thai y karate. Según explicó, "nosotros no les enseñamos a la gente a golpearse, ni mucho menos. Son técnicas de reducción, control y proyección del oponente hacia el piso, mientras esperan la ayuda de Carabineros. Estos movimientos básicos que estamos enseñando los puede hacer cualquier persona, independiente de su condición física. Tampoco les pedimos que lancen patadas sobre la cabeza. No. Les damos herramientas para un fácil control".

Esperan que se sumen

Juan Díaz, presidente del grupo social Vecino Seguro, indicó que "lamentablemente, a vecinos les ha pasado que, durante detenciones ciudadanas, por irse a lo bruto, los tribunales terminan haciendo justicia en contra de nosotros en vez de los delincuentes. No queremos andar pateando a la gente. Sólo queremos aprender a defendernos de estas personas".

"Actualmente somos diez las personas que estamos comprometidos con este curso, pero esperamos que lleguen muchos más", añadió el dirigente.

Sobre las dificultades del entrenamiento, la vecina Audolina Peña señaló que "lo que más nos ha costado es aprender a caer o lanzarse con la otra persona al piso para empujarlo. Pero uno tiene que perder ese temor porque en un enfrentamiento, necesariamente hay que botarlo. Nos han enseñado posiciones, formas de buscar la inestabilidad del oponente y también de desarmarlo. Pero siempre, dejándonos claro que lo más importante es ir haciendo un llamado a la razón". J

"Entrenando una se siente más segura",

Audolina Peña, vecina de Lomas Coloradas.