Karen Loreto Retamal

La palabra cosplay ya está dentro de la jerga popular. Sin embargo, muchos aún desconocen de qué se trata. Según su definición, es la persona que se viste e interpreta su personaje favorito del animé, cómics, videojuegos o caricaturas.

Eso es lo que se puede encontrar en la nueva versión de Expogame, que se realiza en Espacio Marina, desde ayer y hasta el domingo. Un lugar donde los fanáticos de todo tipo se reúnen tanto para disfrutar, como para mostrar su mejor atuendo, el que, a ojos de cualquiera, hace surgir la pregunta ¿Cómo lo hacen?

star wars

A simple vista, Rubén Soto es Obi Wan Kenobi, pero a él le cuesta aceptar que la gente lo ubique de esa manera. Modestamente prefiere que le digan "jedi".

"Uno siempre empieza como fanático, porque te gustan las películas. Cuando se dio la posibilidad de caracterizarme, se dio para el Episodio 3. Me junté con un primer grupo, los conocí y empezamos a ver el tema del traje", cuenta.

Luego, se unió a Rebel Legion, que está reconocida, de manera internacional, por Lucas Film y Disney. "Hay en todo el mundo 75 bases de avanzada en Japón, Egipto, Argentina, Brasil, Estados Unidos, y en Chile está la avanzada, y en eso, nosotros somos los que estamos prácticamente de este grupo. Para postular a la Rebel Legion tenemos que hacer todo un estudio del traje del personaje, porque nosotros hacemos una presentación. Le sacamos una foto al traje y tenemos que postular y para hacerlo, lo toman en cuenta de Estados Unidos, Inglaterra u otros países, los que lo evalúan. Si soy Obi Wan tengo que tener tal cantidad de cápsulas, tengo que dejarme el corte de pelo y la barba. El traje tiene ciertas características y cuando uno los corrige las presenta a la Rebel Legion", explica.

Las características, dice, pasan a ser más que un disfraz, una réplica, por el tipo de estudio que se le hace a las telas y al traje. "Llevo casi 10 años con el mismo look", puntualiza.

Ahora ¿cuánto sale ser Obi Wan? Él señala que es una mezcla. "Si uno tiene los contactos, si tienes la 'chispeza' de resolver ciertos puntos, el traje puede ser más barato de lo que uno cree. Completo sale alrededor de casi 100 mil pesos. En mi caso no, porque compré elementos réplicas del traje, como las botas, el cinturón, las cajas… son como 300 lucas invertidas. El traje al final llama la atención y no pasa a ser un disfraz", comenta Rubén, quien no ha visto nada de la próxima película de "Star Wars", pues quiere disfrutarla como cabro chico.

Posando para cada foto, Nicolás Padilla, el hombre tras el maquillaje de Darth Maul la lleva. Y eso que lleva un par de meses con la caracterización. "Sentimentalmente de toda la vida; con traje, desde septiembre", dice. "Aparte del fanatismo que tengo por Star Wars, éste es mi personaje favorito desde chico. No sé si tengo una razón fuerte, pero creo que físicamente me llamó la atención, es como histriónico, hace piruetas, tiene la espada doble", dice.

Para él, el traje no representa un gasto enorme. Lo maquilla su polola, su suegra le hizo la prenda y los cachos de masilla se los hizo un amigo que trabaja haciendo prótesis y máscaras. "Me lo pego con pegamento de uñas postizas", cuenta.

Antes que el lado oscuro de la fuerza lo cambie, Anakin Skywalker es parte del atuendo de Johan Parra, quien lleva ocho años caracterizándose. "Lo hice por los 30 años de la saga y de ahí no he parado", relata, agregando que su traje no es tan costoso y que ésta es la tercera versión. "El primero lo hice con ropa usada, debe haber salido 20 lucas. El segundo le hice arreglos y el tercero es más profesional para postularlo al Rebel Legion… sumando, unos 100 mil pesos".

¿Y cuándo Darth Vader? "Yo creo que cuando tenga 50 años y sea más veterano", vaticina.

ella se producen.

Las mujeres cosplay no se quedan atrás. Mary Anne Argo estudia antropología, algo muy parecido a su personaje: Lara Croft de Tomb Raider, aunque ella es arqueóloga. "Es muy cercano a mi corazón el personaje. Siempre me ha gustado la saga, aunque no he tenido la oportunidad de jugar todos los juegos, pero el último me lo di vuelta, me encantó. Además, Me gusta mucho jugar videojuegos", cuenta la chica de 23 años, que el año pasado llegó vestida de un personaje de Pokémon.

"Este look, particularmente, como es ropa más normal, las poleras las compré y éste es un pantalón XXL, lo ajusté y le cosí los bolsillos, las botas eran mías, el bolso lo hice yo, el arco también, que es con palitos, porque en el juego el primero que se hace es con ramas y cuerdas. Le hice hoyos a todos. Estuve hirviendo la ropa con bolsas de té. Hay trajes más caros, porque son más complejos, pero éste no", señala la estudiante.

Desde Argentina, Kitty Honey llegó caracterizada de Fiona Directora. "Represento a una directora, que tiene varios aspectos. La regla representa a la espada", explica.

Según cuenta, ella hace sus trajes y, dependiendo de la complejidad, se traduce en tiempo.

Asimismo, reconoce que es bastante costoso ser cosplay, pero "es un hobby que trae varias satisfacciones. Hay que innovarse varias veces por mes", añade.

Por su parte, Britany lleva tres años siendo cosplay. Suma unas 30 caracterizaciones y va por más. Ella se motivó tras ir a un evento y ganar el primer lugar.

"El hecho de hacerlo y sentir el cariño del público, me motivó a seguir siendo cosplay y de ahí no he parado", cuenta.

Al igual que el resto de sus colegas, ella también sabe que sale caro.

"Tienes que comprar género, peluca, lentes de contacto, pestañas, de repente zapatos. Sale arriba de 60 mil pesos, pero depende del traje. Hay que comprar pelucas que puedas ocupar en otros más", dice caracterizada de Poppy Paleta, de Lion of Legends. J

"Si uno tiene los

contactos (...) el

traje puede ser

más barato de lo

que uno cree"

Rubén Soto,