Cada propietario de su vehículo conoce el comportamiento que tuvo éste en su período de vacaciones. Muchos pasaron por caminos agrestes o por largos recorridos que en algo pudieron alterar el normal funcionamiento del auto o camioneta.

Si por alguna circunstancia tuvo alguna situación de improviso en sus vacaciones, por ejemplo una frenada brusca con derrape, debe inspeccionar los neumáticos, y chequear que no se hayan deformado, que no tengan desgaste (la huella no esté por debajo de 1,6 mm), comprobar la presión de inflado. También se ven afectados los frenos, el uso prolongado de este sistema se ocasiona desgaste en sus componentes, como balatas en los sistemas con freno de tambor o las pastillas en los sistemas de freno de disco, además el disco podría deformarse, lo que se debe comprobar con un especialista. El líquido de frenos podría ser otro aspecto a verificar en éstos casos, como su base es alcohol, una exigencia excesiva podría ser causa de su remplazo. También la suspensión, frente a caminos irregulares son causas de verificación después de las vacaciones, si presentan derrames de líquidos o estén manchados, debe revisarlos con el especialista, recuerde que siempre se deben remplazar de pares de amortiguadores o los dos delanteros o los dos traseros o los cuatro amortiguadores, no siempre tienen las mismas características.