Tensión durante desalojo de campamento La Pera
Un grupo de vecinos del campamento La Pera, a un costado de la Aurora de Chile, se opuso durante toda la jornada de ayer a un desalojo encabezado por funcionarios de la Gobernación y el Serviu. Su indignación, acusaron, se debió a que el operativo habría comenzado con la destrucción de un cerco mientras el morador de dicha vivienda no se encontraba. Desde ese momento, las maniobras se transformaron en alegatos entre ambas partes.
Según explicó la asesora jurídica de la Gobernación, Pamela Quijada, "se notificó a seis personas, hace más de un mes, dándoles un plazo hasta el 30 de abril para desalojar sus inmuebles. Cuatro lo hicieron en forma voluntaria, pero quedan dos. Por ello, se coordinaron las acciones para el día de hoy".
Respecto a las dos personas que quedan, añadió que ambas no se encontrarían en el último catastro, por lo que no entran en el grupo de vecinos que recibirá una solución habitacional.
Esta situación fue confirmada a través de un comunicado de la Junta de Vecinos de la Aurora de Chile. Sin embargo, lo residentes apoyaron a los dos involucrados, alegando que el desalojo no se ajustaría al marco legal.
En ese sentido, uno de los afectados, Bernardo Barra afirmó que "presenté un recurso en la Corte de Apelaciones y eso aún está en trámite".
La otra dueña de casa, Jennifer Briones, indicó que "siempre he vivido acá. No estoy en el catastro porque, por razones familiares, me hice una casa en el sitio de mi mamá. No me pueden echar si no tengo dónde ir".
Finalmente, la maquinaria y Carabineros se retiraron del lugar. Sin embargo los trámites para el desalojo continúan.