"Menos mal le ganamos a los bolivianos", es lo que creen todos en Chile. Muy parecido a lo que piensa Rodrigo Jerez, representante de la zona en Boston, y que ayer fue al Gillete Stadium, para ver a Arturo Vidal anotar ese agónico penal en los últimos minutos, y así decretar la primera victoria chilena en suelo estadounidense. Es que el oriundo de Penco partió a Norteamérica con un amigo de Concepción, para allá juntarse con una familia lejana, que reside en Nueva York. Sin embargo, la travesía en la tierra del "sueño americano", no ha sido como todos los chilenos esperaban, menos Rodrigo.
Pese a que La Roja ganó, el joven es cauto a la hora de analizar al equipo de Pizzi. "Queda el último partido del grupo para responder a las expectativas del campeón", comenta optimista el pencón, que asume la triste realidad del equipo chileno.
"Es difícil aceptarlo, pero volvimos a los tiempos en que dependíamos de las individualidades en vez del equipo", añade resignado Rodrigo, mientras se retira del moderno estadio de Boston, recién terminado el lance contra Bolivia.
Estadios de lujo
El muchacho de la octava región tiene toda una vida ligada al fútbol: su hermano Patricio fue campeón con Cobresal el año pasado, y él juega en un conocido equipo de futsal de la zona. "Juego en los Extraterrestres (ET) que es un grupo de amigos muy aficionados al fútbol", cuenta el crack.
A pesar de estar relacionado con el deporte rey desde que tiene memoria, nunca había tenido la posibilidad de presenciar un campeonato de esta envergadura.
"La organización y la infraestructura de los estadios es tremendo, todo bonito, todo planeado, señalizado. No hay problemas para ingresar o salir de los estadios. La organización ha sido lo mejor de la Copa América", resume Rodrigo, que se queda en Estados Unidos hasta final de mes, y hasta ahora, nadie le quita el sueño de poder gritar campeón de América el 26 de junio en Nueva York. "Chile estuvo mal. Es un equipo plano, sin cambios de velocidad, y carente de ideas", profundiza con respecto al juego ante los bolivianos, que estuvo a punto de dejar en la cuerda floja a la selección chilena.
"Me quedo acá hasta el 29 de junio, así es que ojalá Chile se ponga las pilas" dice ilusionado el hincha, que reconoce que en el partido de ayer había muchos menos chilenos que en los anteriores. "En el primero habían como 19 mil, y la mayoría chilenos. Hoy (ayer) no había tantos", cierra Rodrigo.
"Me quedo acá hasta el 29 de junio, así es que ojalá Chile se ponga las pilas"
Rodrigo Jerez, penquista
Christian Ovalle Ríos deportes@estrellaconce.cl