Mario Saavedra Ponss
Luego de 44 días de angustia, la familia de Francisco Acuña (22) un maestro pintor desaparecido desde mayo pasado en el río Bío Bío, habría puesto fin a la incertidumbre por saber de su paradero tras el hallazgo, durante la madrugada de ayer, del cuerpo que correspondería al joven trabajador. El rescate de los restos fue posible gracias al apoyo de Bomberos de San Rosendo, quienes acompañaron a los seres queridos del muchacho durante cada jornada de búsqueda.
Tragedia en paseo
Cabe recordar que el joven de Chiguayante habría caído al cauce durante la madrugada del 29 de mayo, mientras compartía con unos primos a pocos metros de la estación El Gomero, en Hualqui. Aquel día, según recordó su prima hermana Claudia Acuña, "salieron a pescar todos juntos a un lugar que conocían muy bien porque venían muy seguido".
Durante esa jornada, el grupo había viajado en el Corto Laja, como acostumbraban. Según relataron, compartieron durante la noche y cuando dos de los primos se habían ido a acostar, sintieron un ruido similar al que se produce cuando una persona cae al agua. Imaginando que era Francisco, uno de ellos incluso se lanzó al río para buscarlo.
Su familia no conoció el descanso desde entonces. Viajaron cada día. Y ayer por la mañana, el esfuerzo de todos habría dado frutos: a 600 metros de la estación de Quilacoya, en medio del río, el Gersa de Bomberos de San Rosendo encontró el cuerpo que, según Carabineros, fue reconocido por su hermano como el del joven buscado.
Lluvia ayudó
Según el superintendente Mario Guzmán, "es posible que el cuerpo de Francisco haya estado embancado entre la arena del fondo. Pero con la lluvia del fin de semana y el aumento del torrente, se habría movido y llevado a la superficie. Su hallazgo ocurre a 400 metros de la orilla, a unos diez kilómetros desde donde desapareció originalmente".
Añadió que los voluntarios siguieron acompañando a la familia del joven por motivos morales y se mostró contento de haber culminado, con éxito, el operativo. Tras el hallazgo, la Fiscalía instruyó el trabajo de la Brigada de Homicidios de la PDI de Concepción cuyos detectives, en conjunto con el Laboratorio de Criminalística, realizaron los peritajes correspondientes.
Agradecidos
La prima del fallecido, Claudia Acuña, recalcó su agradecimiento a los voluntarios de San Rosendo. "Siempre tuvieron la buena voluntad para estar con nosotros. Gracias a eso, nunca nos sentimos solos, a diferencia de las autoridades, quienes se desentendieron del caso", señaló.
Por su parte, Marcos Acuña, también familiar de Francisco, indicó que "quien se portó muy bien fue el mayor de Carabineros de Chiguayante. Él gestionó hasta un helicóptero cuando nadie más pudo".
El joven fue recordado por sus cercanos como un muchacho responsable y trabajador. "Él era la alegría de la casa", contó Claudia. Marcos añadió que "era mi hermano, trabajaba conmigo, nos criamos todos juntos en la misma casa en Chiguayante".
Su cuerpo fue llevado al Servicio Médico Legal de Concepción para la autopsia de rigor.
"El hallazgo ocurre a 400 metros de la orilla, a unos 10 kilómetros de donde desapareció".
Mario Guzmán