Bellavista sufre con los robos y el microtráfico
Vecinos del insigne barrio tomecino aseguran que menores de otras partes llegan a perturbar la población.
El histórico barrio Bellavista, en Tomé, ya no es lo mismo que antes. Al menos, esa es la opinión unánime de los vecinos, que han visto cómo en los últimos años la delincuencia y el tráfico de drogas han manchado las pacíficas calles del sector. La emblemática población se ha visto afectada con la llegada de personas externas, que se han encargado de alborotar las noches tomecinas.
"Después de cierta hora ya no se puede salir a pasear con los niños o los perros", apunta Gerson Moena, quien ha vivido sus 30 años de vida en el barrio tomecino, a excepción del año pasado, cuando vivió en Santiago. Sin embargo, el destino lo hizo retornar a Tomé. "Cuando volvimos con mi familia, el barrio había cambiado", agrega.
Externos al barrio
Lo de la delincuencia, transacciones sospechosas y manejo de drogas es algo nuevo en el lugar. "Se nota que son gente de afuera los que vienen a ensuciar el barrio, porque los de acá nos conocemos todos", asegura la joven presidenta de la Junta de Vecinos, Francisca Zúñiga Pereira, quien lidera el barrio desde hace un año aproximadamente.
Además del tema de las drogas y los robos que se han visto en el sector, otra práctica que molesta entre los vecinos es el famoso "cambiazo", que explica la dirigenta de los adultos mayores del sector, Elsira Reyes: "Se te acercan diciendo que estaban haciendo un trabajo chico, y que necesitan sencillo para pagarle a los demás trabajadores. Ahí te cambian sus billetes de 20 mil por billetes más chicos, pero los que te pasan ellos son falsos". Sin embargo, asegura que se ha corrido la voz, y que ya están más alerta con las personas ajenas al lugar.
Poca dotación policial
"No tengo nada que decir de la municipalidad, pero el problema de la poca dotación de Carabineros en el lugar es preocupante", confiesa Francisca Zúñiga, que a pesar de tener identificados los focos de delincuencia, cuenta que Carabineros no da abasto. "Nos dicen que si no hay pruebas o evidencias no se puede hacer mucho", explica la dirigenta vecinal.
"A veces se ven Carabineros por acá, pero pasan no más, como para anotar en la libreta que estuvieron", comenta Gerson Moena, mientras con su pareja pasea a su hijo de sólo un año en plena Plaza del barrio Bellavista. "El problema es en la noche", añade el tomecino.
No todo es negativo
A pesar de las malas noticias ligadas a la delincuencia, la gente del barrio Bellavista todavía puede vivir tranquila durante el día. "Creo que no hay mejor lugar para críar hijos que éste, por eso no me he ido", dice la representante vecinal, que tiene una hija de 2 años y medio. "En el día podemos caminar como siempre ha sido", opina Gerson, que se cuadra con la opinión de Francisca.
"Después de cierta hora ya no se puede salir a pasear con los niños o los perros"
Gerson Moena, vecino"
La voz de los vecinos
Ana Hinrichsen, vecina
"Comparado con el centro no es mucho lo que han robado, pero sí he escuchado que para las partes rurales hay más robos".
Gerson Moena, vecino
"He vivido toda mi vida acá, y mis papás y abuelos también. Antes yo dejaba la bicicleta afuera y no pasaba nada, ahora ya no se puede".
Frente a lo que ellos llaman el "chipe libre" que tienen los delincuentes en el sector, los vecinos han decidido defenderse como comunidad. "Estamos trabajando con alarmas de seguridad ciudadana, y queremos hacer una brigada de seguridad liderada por vecinos jubilados de la PDI y Carabineros", explica Francisca Zúñiga, dirigenta vecinal, quien se ha esmerado por desarrollar actividades de todo tipo en el barrio. Y la gente la apoya, porque es un barrio que genera mucho arraigo en la gente. De hecho, cuenta que van a tener tres plazas nuevas en el lugar. "Este domingo vamos a celebrar el Día del Niño en el gimnasio del colegio", añade la representante del barrio, que busca alejar a los niños del camino de las drogas. "Nos tratamos de juntar con frecuencia, porque todos los días pasan cosas", cierra.
Tomecinos se organizan ante el delito
Teresa Peña, vecina
"Dicen que son todos niños que se juntan, y compran venden, y hacen transacciones con las drogas, se van a tomar copetes".
Elsira Reyes dirigenta social
"Últimamente se nota la delincuencia, quizás antes estaba más oculta, pero ahora se ve que se reúnen a hacer cosas raras".
1920 Década en la que se creó el Barrio Bellavista, para los trabajadores de la fábrica textil.
2008 es el año en que se cerró la fábrica homónima del barrio. Reabrió dos años después.