Gonzalo Cifuentes Uribe
Javiera tiene 22 años de edad y, junto a miles de jóvenes penquistas, comparte una terrible realidad: ser víctima de acoso sexual arriba de una micro. "Iba de vuelta a mi casa, tipo seis de la tarde y el bus iba lleno, por lo que me tocó ir parada. De pronto subió mucha más gente y un tipo que estaba detrás de mí, me empezó a rozar. Fue súper desagradable la situación", relató la universitaria.
Presa del impacto e indignación que le causó el hecho, le propinó un par de codazos al individuo, según relató. "Es súper típico que pasen este tipo de cosas. Otra forma es que cuando una va sentada, algunos tipos cargan sus partes íntimas sobre ti", se lamentó.
Para evitar casos como los sufridos por Javiera y otras cientos de mujeres de nuestra ciudad, es que autoridades del Gobierno y otros actores sociales, iniciaron ayer una mesa de trabajo, cuyo fin es generar un cambio cultural y desarraigar este tipo aberrante de costumbres entre algunos hombres. "Lo primero que se debe hacer es un cambio cultural. Para ello hay que visibilizar el problema y evitar que se naturalicen este tipo de acciones", indicó Susana Riquelme, coordinadora de Programas de Inclusión de la Universidad del Bío Bío.
"Se identificó, a través de encuestas, que el segundo lugar en donde más ocurren los acosos es en la locomoción colectiva", informó Valentina Medel, directora regional del Sernam. El primer lugar es la calle, puntualizó.
La mesa utiliza, entre otras herramientas, la encuesta realizada el año pasado por el Instituto Nacional de la Juventud. En ella, se indicó, de acuerdo a lo señalado por la jefa regional del Sernam, que las jóvenes de Concepción por el norte a Magallanes por el sur, sufren de acoso al menos una vez a la semana.
Este estudio agregó que una de cada dos mujeres declara haber percibido acoso sexual en su contra en los últimos siete o treinta días. "No sólo las jóvenes sufren, sino que las niñas están igual de expuestas", lamentó la directora Valentina Medel.
Conductores
Para lograr ello, se reunieron con el gremio de la locomoción colectiva, quienes brindaron su apoyo a la causa. "Todos los buses del Gran Concepción cuentan con sistemas de cámaras, por lo que allí está el material probatorio en caso de sufrir un incidente", afirmó Víctor Fuenzalida, asesor de la Alianza Gremial de Transporte.
De acuerdo a lo relatado por el representante de los transportistas, en varias ocasiones los conductores han defendido a las víctimas y han llevado hasta unidades policiales a los agresores. "Para poder recibir ayuda de nuestros choferes, es necesario que denuncien lo que está pasando y así serán apoyadas", aseguró Fuenzalida a La Estrella.
Denuncias
"Siempre se mantuvo silenciosa esta conducta y ahora los estudios arrojan estos resultados. Debemos crear una propuesta que ayude a abordar esta problemática", agregó el seremi de Transportes, César Arriagada. "También es importante que la gente reaccione, ya que las mujeres no están siendo apoyadas por el entorno en estas situaciones", agregó el seremi Arriagada.