Christian Ovalle Ríos

Los dulces han llamado la atención desde siempre, y más ahora que los cupcakes se han puesto de moda. Los productos que ofrecen los cafés o restaurantes son cada vez más variados, y las grandes responsables son las personas que fabrican estas delicias. La Estrella fue en busca de dos jóvenes emprendedoras penquistas, que hacen un exquisito trabajo de repostería, y son las que abastecen a los hoteles, cafeterías o restaurantes de la zona.

A pesar de ser distribuidoras a locales grandes, las personas comunes y corrientes también pueden dirigirse a sus locales para hacer pedidos o probar los innovadores productos que ofrecen Constanza Lavín y Rocío Jaque en sus respectivas pastelerías.

Invasión de cupcakes

Desde hace unos años que los cupcakes se han ganado un lugar en el paladar de los penquistas. En Conce, estos pequeños "quequitos" de distintos sabores y diseños han tenido cada vez mejor aceptación. Mucho tiene que ver con el "boom" de esta masa dulce decorada un lugar ubicado en Rengo 13, donde hay una vitrina con la cual es imposible no tentarse.

"Chiché Cake Boutique" tiene un poco más de un año ofreciendo lo mejor de la repostería de Conce. Aquí Constanza Lavín, de 25 años, ha combinado su experiencia en la cocina con estudios en el extranjero. "Los cupcakes son la especialidad, pero también tenemos tortas de distintos tamaños, o en frascos, además de brownies, entre otras cosas", explica la dueña del local, quien a pesar de no estudiar gastronomía, hizo cursos de repostería el 2012 en Argentina, ("en el 'Gato Dumas' en Buenos Aires", precisa) y en Inglaterra el 2014 ("en 'Le Cordon Bleu', en Londres).

Esta diseñadora de ambientes y objetos, complementó además el conocimiento que adquirió en la universidad con su emprendimiento en la decoración del espacio, al cual también puede ir a sentarse a disfrutar de las variedades que ofrece "Chiché".

"Estamos trabajando mucho con pedidos para cafés, y obviamente también atendemos a particulares. De hecho tenemos pan que lo hacemos acá mismo", añade la dueña del establecimiento, que funciona también como banquetería para eventos.

Respecto al nombre del lugar, todo fue luego del viaje que realizó Constanza a Argentina. "El Chi es por Chile, y el Ché es por Argentina", aclara. Una de las particularidades de "Chiché", es que los pedidos que realicen los clientes con anticipación pueden ser personalizados con algún mensaje en los cupcakes. Las delicias que hacen en esta verdadera fábrica de sabores, están disponibles en www.chiche.cl, o en el fanpage de Facebook.

Vida sana...y sabrosa

"Low & Free" es el nombre del negocio ubicado en el edificio Don Camilo, local 106 (calle San Martín entre Padre Alberto Hurtado y Arturo Prat) y que tiene una innovadora oferta para un grupo de gente que muchas veces es olvidado por los locales de comida a la hora de hacer sus menús. "Para las personas que somos celiacas o intolerantes a la lactosa, por ejemplo, no hay nada. Vamos a un café y nos tenemos que comer una fruta porque no hay nada más", dice Rocío Jaque, dueña del emprendimiento.

Hace 5 años aproximadamente a la ingeniero comercial le diagnosticaron la enfermedad celiaca (intolerancia al gluten del trigo, cebada, centeno y en algunos casos avena), y se dio cuenta del reducido mercado en el que podía comprar alimentos.

"Me di cuenta cuando fui al supermercado que la comida que había era cara, no había nada fresco, viene todo envasado y que en realidad no existe mucho", dice la penquista. "Empecé a hacer las recetas para mí, con Joaquín Inostroza, que ahora es mi socio, y comenzamos a venderle a familiares", recuerda Rocío, que empezó con el negocio el 1 de enero de 2015, y se estableció hace casi un mes con el local físico gracias a un fondo de Innova Bío Bío. Ahora, la emprendedora vende alfajores, galletas, muffins, tortas y pies, todo sin lactosa ni gluten, ni azúcar.

"Se agradecen este tipo de iniciativas, porque efectivamente los intolerantes a la lactosa tenemos que andar buscando qué comemos y qué no", asegura Gabriela Soto.

"Con el tiempo fuimos experimentando, y nos dimos cuenta que la comida además de ser sana, era súper rica", dice Rocío Jaque de 31 años, que ejerce la ingeniería comercial de forma paralela al emprendimiento que lleva con su socio, Joaquín Inostroza. "Hacemos las mismas recetas pero les cambiamos la harina de trigo, y el sabor es tan rico como las que sí tienen harina de trigo", señala Rocío, que afirma que uno de los factores que los motivó a lanzarse con el emprendimiento es que además de los intolerantes a algunos alimentos, hay otros que han preferido una dieta más sana simplemente por temas de salud y prevención.

La página web de "Low & Free" estará disponible desde el próximo mes (www.lowfree.cl), y además tiene una página en Facebook donde se pueden ver los distintos productos que hay en el local.

dulce youtuber

Otra joven vinculada al sabroso rubro de la repostería es Javiera Bretti, una chorera que hace cerca de seis meses hace videos en la plataforma Youtube, con tutoriales de pastelería. "En el último tiempo he estado haciendo dulces que venden en los kioscos, y a la gente le ha gustado bastante", dice la youtuber, dueña del canal "Petit bakery", además de ofrecer el servicio en otras plataformas como facebook y snapchat.

"En snapchat tengo una relación directa con los que ven los videos, y tomo muy en cuenta las sugerencias para mejorar", reconoce Javiera, que tuvo más de 3.500 visitas en uno de los últimos tutoriales que subió.

"También tenemos pan fresco, que lo hacemos acá mismo"

Constanza Lavín,, dueña de Chiché Cupcakes."

"Con el tiempo nos dimos cuenta que la comida, además de ser sana, era súper rica"

Rocío Jaque, dueña de "Low & Free"."