La práctica profesional es un proceso de suma importancia para los alumnos que están estudiando alguna carrera de educación superior, ya que es la oportunidad que tienen de aplicar todos los conocimientos y competencias que han adquirido durante sus años de estudio. Este es un proceso que, sin duda, ayuda a complementar su formación, sobre todo si se realiza en una empresa que valore su aporte. Se obtendrán nuevas experiencias, conocimientos, habilidades y destrezas, logrando así adquirir competencias idóneas para poder desarrollarse dentro del mercado laboral.

Para que una práctica sea exitosa no solo depende de los conocimientos adquiridos durante los años de estudios, sino que también depende de la actitud que tengan con sus compañeros y jefaturas. Deben proyectar como mínimo una actitud servicial, cordial, natural, cautelosa, de cooperación, de coherencia y adaptación.

Los estudiantes en práctica deben tener sentido de pertenencia por la empresa, en otras palabras "ponerse la camiseta", aprovechar las posibilidades y aplicar todos sus conocimientos y habilidades frente a las distintas situaciones o actividades que se le asignen. Además, deben ser capaces de adaptarse fácilmente a los cambios e incorporarse en los grupos de trabajo para adquirir más experiencia. La práctica es una etapa relevante dentro de la formación profesional de los alumnos, por ende, es importante obtener buenos resultados en este proceso.

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