Adriano González H.

En "Swing", película chilena que se estrena hoy en las salas de cine, no existen malos ni buenos. "Tratamos de generar una comedia un poco más dramática, que no tocara tantos puntos comunes como de las comedias que se vienen haciendo y jugar un poco con personajes más reales, fuera de los estereotipos", afirma su director, Lucho Smok.

Smok cuenta que su primer largometraje no nació de una idea particular, sino que más bien trata de contar una buena historia sobre una generación que cree que es más adulta. "No es infantil, ni adolescente, sino que apunta a un público mayor", añade.

"Es una cinta que intenta reflejar la vida de personas que están entre sus veinte, treinta y cuarenta años, sin el fin de verse reflejados en los personajes, sino que más bien en la situación en la que están inmersos, en: ¿qué haría yo si me pasara esto?".

Trama

Gustavo (Héctor Morales) y Dolores (Elisa Zulueta) es una pareja feliz, aparentemente sin problemas. Hasta que sus amigos Pedro (Tiago Correa) y Camila (Daniela Ramírez), quienes pasan por un mal momento económico, se instalan a vivir en su casa mientras resuelven sus problemas financieros.

Lo que nadie espera es que esta decisión provoque una crisis, luego de una noche de confianza que los lleva a realizar un inesperado intercambio de parejas. Forzados a convivir, deberán resolver sus diferencias y afrontar el resultado de sus acciones.

-¿Cómo ves la evolución de la sexualidad de chilenas y chilenos?

"Es súper compleja. La sexualidad en Chile ha tenido como varios boom históricos en el cine. Creo que 'El chacotero sentimental' (1999) fue el puntapié inicial, de ahí un poco que nos dormimos. Luego volvió una liberación un poco más sexual que tiene que ver con los tiempos modernos. Pero creo que seguimos siendo bastante doble estándar de lo que decimos afuera y lo que pasa dentro de la pareja.

Comunicación

Uno de los grandes conflictos que aborda la cinta es la falta de comunicación en las parejas. "En la historia no se cuentan las cosas y muchas veces se da una conexión fría; eso termina generando varios desencadenantes dentro de la trama", dice el director, quien cuenta la inquietud por mostrar esta "sexualidad para afuera" que se da entre grupos de amigas o amigos.

-¿Cómo va a salir una pareja después de ver la cinta?

"A mí me gustaría que la pareja salga entretenida, que se divierta. La película es una comedia, más allá de que plantea varios conflictos, es una comedia y la idea es que la gente se ría. Pero también me gustaría que la gente salga conversando: ¿qué pasaría si nos pasa esto? o ¿tú qué harías? Eso es lo que más me interesa, que se diviertan, que les permita conversar y ver qué pasa. También ahí con una cervecita hablando la película, fantasía por aquí, fantasía por allá… a ver si crece la población chilena, jajajá".

"A mí me gustaría que la pareja (que vea la cinta) salga entretenida, se divierta, pero que también salga conversando"

Lucho Smok, director"

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