Japoneses explican las virtudes que en Rusia los hicieron famosos
Imágenes de los hinchas nipones limpiando los estadios causaron asombro. "Ellos no pierden nunca sus principios", dice una japonesa que vive en San Pedro de la Paz.
Una de las imágenes que probablemente quedará en la retina tras el paso de Japón por el Mundial de Rusia 2018, será de la de los hinchas nipones limpiando el estadio tras los encuentros de su selección. La actitud de los fanáticos japoneses es coherente con lo que hizo el propio plantel luego de la derrota frente a Bélgica por octavos de final: limpiaron completamente el camarín que ocuparon, dejaron una tarjeta de agradecimiento y... en ruso.
"En Japón hay un dicho que dice algo así como que 'pájaro que se va, deja todo limpio', o sea que toda persona que se va de un lugar tiene que dejar todo limpio, como tiene que ser. Es algo normal allá", explica Akiko Gyobu, japonesa que vive hace más de 20 años en San Pedro de la Paz, pero que no ha perdido su cultura.
Aclara que el aseo es parte de la vida cotidiana de los japoneses, incluso desde que son niños. "En las escuelas, los niños hacen el aseo, todos limpian después de clases, porque hay grupos de aseo y se van turnando para limpiar no sólo las salas, sino también los baños y las salas de profesores; allá no hay auxiliares de aseo", dice.
"El japonés respeta mucho el espacio del otro y también el espacio físico donde está", detalla
La disciplina y autonomía es algo que a los japoneses se les inculca desde muy chicos, explica Akiko. "Los niños se van solos al colegio o a comprar, en Japón no hay furgón escolar, todos los niños se van caminando, usando micro o tren", detalla.
Es más, no es socialmente aceptado que los apoderados lleven a los niños al colegio, ellos tienen que hacerlo por sí mismos.
Akiko confiesa que al principio le fue difícil adaptarse a la idiosincrasia local, porque en Chile es muy distinto. "Acá todavía hay algunas personas que botan papeles en la calle. Eso no es posible allá, los japoneses no necesitan de nadie que les diga que tienen que limpiar, sólo lo hacen", sostienen.
Mucha disciplina
"Es una actitud que no sorprende a quien conoce la forma de ser de los japoneses", asegura el sensei penquista Hernán Beltrán, gran conocedor de la cultura de esa nación asiática, país que ha visitado en 14 oportunidades, tanto para aprender de sus maestros en el karate, como para empaparse de la cultura nipona.
"Cuando he ido, he asistido a gimnasios y estadios, de otros deportes, y el único personal que hay es para apagar la luz. No se necesita personal de aseo", asegura.
Beltrán explica que la disciplina es una parte fundamental de la forma de ser de los japoneses.
Como para explicar esa característica, cuenta una anécdota: "En uno de los primeros viajes que hice a Japón, le pregunté a un estudiante qué hacía cuando llegaba atrasado a entrenar. No me entendía. Después me di cuenta que los japoneses nunca llegan atrasados, ni siquiera tienen una palabra para eso en su vocabulario".
El sensei también explica algo que ocurrió en el partido mismo que los japoneses perdieron en el último minuto del alargue contra la selección belga. "Se ha hablado mucho de que Japón podría haber esperado que terminara el tiempo, pero eso no existe para ellos, ellos no pierden sus principios, y entre ellos está el luchar hasta el final, hasta el último esfuerzo", manifiesta.
"Les puedo asegurar que todos se fueron con la frente en alto, más allá de un lógico momento de tristeza o frustración, pero saben que dieron todo de sí".
Honor y lucha
Además, cuenta, que los japoneses saben reponerse bien de los reveses deportivos y de la vida en general. "Tienen un dicho que señala: 'Siete veces me caigo, pero ocho veces me levanto' (Nana korobi ya oki), y es para sobreponerse a las adversidades".
Según Beltrán, que incluso ha aprendido el idioma japonés, los nipones valoran el esforzarse hasta el final, sin nunca abandonar. "Para ellos eso es sabiduría e inteligencia, no está entre sus posibilidades el hacer una pillería para ganar, es más importante el honor".
"Toda persona que se va de un lugar tiene que dejar todo limpio, como tiene que ser"
Akiko Gyobu,, ciudadana japonesa en Conce"