Sepa cómo es cuidar y vivir con un abuelito en la casa
Atenderlos y escucharlos es la principal acción que realizan las personas que cuidan a adultos mayores.
Angélica Benavides tiene 61 años y jubiló para dedicar su tiempo a cuidar a su madre Rosa Parra, de 96 años, quien sufre de glaucoma y recientemente de algunos problemas para caminar, lo que no le permite ser autovalente.
"Somos nosotras dos, más mi sobrino-nieto de 13 años. Mi mamá no puede ver. Hay que atenderla y hacerle de todo: bañarla, vestirla, darle su desayuno, su almuerzo y su once. También le doy su medicina para la presión y sus gotas para la vista. A las 19.00 le da sueño y se va a dormir".
Angélica trabajó de secretaria en una empresa constructora y hasta hace algunos años, su madre podía ser independiente. "Cuando trabajaba, mi madre podía hacer todo sola. Justo coincidió en que tenía que cuidarla al momento de jubilar. En todo caso, yo siempre he vivido con ella. Soy soltera y no tengo hijos", señaló.
"Es muy buena hija". Esas fueron las primeras palabras de Rosa Parra mientras Benavides contaba su rutina para cuidarla. "Tengo tres hijas contando a Angélica. Luciana y Norma vienen a verme de forma seguida. También tengo ocho nietos", agregó.
"Conversamos siempre y, a pesar de su edad, nunca se ha quedado en el pasado y acepta más fácil los cambios que una misma. Sus nietos la quieren mucho porque no es crítica y siempre está de buen ánimo. Mi madre no sabe leer, pero tiene un criterio muy amplio y es muy empática. Su humor es bastante bueno y eso hace más fácil cualquier cosa", añadió Angélica Benavides.
Dificultades
"La gran limitante en mi caso es prácticamente no poder salir de la casa porque no quiero que ella quede sola. Obviamente realizo trámites, pero no salgo tranquila. El pasear sola queda en segundo plano, aunque he disfrutado mucho de mi juventud. La pasé bien y he estado en el extranjero", dijo Angélica, quien vive cerca de Collao hace dos años.
Angélica valoró el amor que le ha entregado Rosa. "Mi madre me crió solita porque quedó viuda cuando yo tenía un año. Fue mamá y papá. Ella trabajó lavando ropa. Cómo no voy a agradecerle todo lo que ha hecho por mí. Nunca va a ser un problema cuidarla", agregó.
Por último, Benavides señaló que le gustaría que "las personas que nos dedicamos a cuidar a nuestra familia sin poder trabajar, recibiéramos una compensación porque no podemos salir de la casa".
"Lo único que uno pide es ser tomada en cuenta y ser escuchada. Más que eso no se puede pedir. Con mi hija nos reímos y conversamos mucho", sostuvo Rosa.
Camino a los 105
En el sector Santa Alicia de la localidad de Dichato, vive José Eduardo Sotomayor Calixto. El 5 de septiembre cumplirá 105 años de edad y es dependiente. Sin embargo, para su familia eso no significa que no deban cuidarlo.
Su nieta, Cecilia Rami, quien ayuda a cuidar a su abuelo, dijo que "le falla un poco sus piernas. Él camina y hace su cama, pero hay que tener cuidado con las comidas y con las caídas. En ese sentido, estamos siempre pendientes. Ayer estuve sembrando hortalizas con él".
Además, Rami dijo que "cuidarlo implica también ir a comprar sus medicamentos. Si quiere salir, debemos trasladarlo en vehículo porque vivimos en un cerro".
No obstante, para la nieta de José Eduardo Sotomayor, lo más importante es el amor de la familia hacia él. "Mi abuelo quedó viudo hace cuatro años y desde ese momento necesitó de cuidados de mi madre Liria Agüero. Él tiene una memoria increíble y conversamos mucho", sostuvo.
"Amor, amor y más amor. Hay que agradecer todo lo que han entregado las personas mayores a nosotros. Mis abuelos cuidaron de sus nietos muy bien", añadió Rami.
José Eduardo Sotomayor dedicó gran parte de su vida a la industria del calzado y lamentó su dificultad para moverse actualmente. "Están preocupados de mí porque estoy un poco enfermo y no puedo andar mucho. Estoy medio chueco de las piernas".
A pesar de ello, a sus 104 años aún puede vestirse solo. "Ahora me cuesta más, pero lo logro. Me importa que cuiden bien a las personas viejitas. Tengo una familia maravillosa que me escucha. Así como me criaron mis padres, crié a mis hijos. No me gusta que en otros casos tengan botadas a las personas ancianas y que no las vean nunca. Eso es malo".
Nietos y sus abuelos
Jorge Ruiz es de Talcahuano y vive con su abuelo Luis Escobar de 77 años en la población Santa Clara.
"Me crié con mi abuelo y a diferencia de muchas personas, el estar con él forma parte de mi cotidianeidad", dijo.
El enfoque de su cuidado, según Ruiz, se basa en "detalles importantes como precaución. Hay que tratar de evitar situaciones de peligro para que no se caiga".
Entre las dificultades para cuidar a su abuelo Luis, Jorge señaló que "con la edad uno se puede poner un poco más mañoso, como por ejemplo, con el tema de la sal en las comidas. Él es diabético e hipertenso, entonces me preocupa de que estén las cantidades suficientes y eso a veces le puede molestar".
No obstante, Ruiz dijo que su abuelo "es independiente. Tiene su entorno de amigos y va al centro" y agregó que "si él necesitara un cuidado permanente, contrataríamos a alguna persona que se encargue de aquello".
Ignacio Rojas es psicólogo y trabaja en un colegio chorero. Vive con su abuela, pero a diferencia de Jorge Ruiz, esta situación es algo nuevo para él.
"No tuvimos mucho contacto en mi niñez y luego de la muerte de mi abuelo, ella vino a vivir con mi familia y hoy somos buenos amigos. Hay aspectos súper importantes al vivir con un adulto mayor, el primero es empatizar con ellos y ser conscientes de la etapa evolutiva que atraviesan, Ellos necesitan sentirse útiles y vigentes, por lo tanto hay que confiarles responsabilidades en la medida que puedan asumirlas sin problemas", sostuvo Rojas.
"Mi abuela puede cocinar, pero no puede salir sola porque tiene mal sentido de la orientación. Si a ella le hablo y no escucha lo que digo, se lo repito. Se siente mal si no lo hago", finalizó el psicólogo.
"Lo único que una pide es ser tomada en cuenta y ser escuchada. Más que eso no se puede pedir".
Rosa Parra, tiene 96 años y vive con su hija"
"Me importa que cuiden bien a las personas viejitas. Yo tengo una familia maravillosa, que me escucha".
José Eduardo Sotomayor, cumple 105 años"
105 años cumplira José Eduardo Sotomayor Calixto el próximo 5 de septiembre.