Pablo Martínez Tizka

Audiencias virtuales, traductores en línea y una sala multimedia para niños son solo algunos de los avances tecnológicos mostrados por el Juzgado de Familia de Coronel, que ha sido pionero en proyectos de innovación en el Poder Judicial.

El recinto, que en la actualidad cuenta con cinco jueces, comenzó desde 2012 a concretar iniciativas que en la mayoría de los juzgados nacionales no existen. La primera de ellas fue la implementación de un tótem de atención de público, que ha servido para reducir el tiempo máximo de espera a 20 minutos.

Tres años más tarde se inauguró la sala multimedia para niños de 2 a 12 años, quienes quedan a cargo de una parvularia mientras sus padres o familiares están en plena audiencia.

Finalmente, durante este año el juzgado obtuvo el tercer lugar nacional en un concurso de innovación con el proyecto "Desarrollo de audiencias por telepresencia" para llevar a cabo las subrogaciones y evitar reprogramaciones y suspensiones.

Pioneros

Andrea Caro es la jueza presidenta del Tribunal de Familia de Coronel. Sobre los avances tecnológicos señaló que "las iniciativas que parten desde nosotros son conforme a las necesidades que advertimos".

En ese sentido, valoró especialmente la sala para niños, cuyos efectos son los esperados. "Desde el punto de vista del niño ha sido muy positivo porque se relajan y se distraen. Que se encuentren con la Tia Claudia, quien es la parvularia, genera un beneficio fantástico. Ellos tienen el derecho de ser oídos".

Añadió que antes los menores "muchas veces tenían que ingresar a la audiencia y oír lo que se discute. Eso implicaba para nosotros una incomodidad".

José Manuel Soto, administrador del recinto, destacó que "sólo cuatro tribunales en el país tienen esta sala: Coronel, Antofagasta, Los Ángeles y Puerto Montt. La iniciativa partió aquí".

Quien está a cargo del cuidado de los menores es Claudia Aguilar, quien dijo que "contamos con juguetes, rompecabezas, útiles para dibujar y pintar. Hay un trabajo de contención que es mayor en comparación a trabajar en un jardín. Los padres están muy agradecidos".

Sala gesell

La jueza Andrea Caro destacó la tecnología presente en la Sala Gesell, especial para que los niños sean escuchados en el contexto de una citación al Tribunal.

"Si se cita a un niño, no va a la sala de audiencias, sino a la sala Gesell que tiene una ambientación especial con colores y un asiento cómodo. A él o ella lo entrevista una consejera técnica, mientras el juez está detrás de un vidrio junto con el curador ad litem", describió Caro.

Esa tecnología se modernizó cuando en la misma sala se atendió a una niña haitiana, quien hablaba creole.

Marco Contreras, informático del juzgado, instaló el Sistema Vi-Sor que cuenta con traductores en creole, inglés, mapudungún y lenguaje de señas. "La barrera del idioma es complicada y los niños se pueden sentir intimidados. Era un tema complejo y surgió la innovación. En ese sentido, la jueza Caro añadió que "el Poder Judicial no puede estar fuera de una realidad que es la presencia de personas extranjeras".

Richard Vaval, traductor de creole conversó con La Estrella desde Santiago, a través del Sistema Vi-Sor, y señaló que "hay que tener conocimientos jurídicos. El Poder Judicial tiene contratado este sistema".

Telepresencia

La principal novedad tecnológica de este 2018 fue el desarrollo de audiencias por telepresencia. Marco Contreras explicó en qué consiste este proceso. "Esto surgió por la problemática de las subrogaciones de audiencias en el Juzgado de Letras y Familia de Arauco para evitar suspensiones o reprogramaciones. La audiencia se realiza virtualmente. El juez se conecta por videoconferencia, mientras las personas están en la sala de audiencia en Arauco. Todo se realiza de manera normal y se ahorra en tiempo".

El administrador José Manuel Soto añadió que "la innovación hace que con creatividad dispongamos de recursos que día a día necesitamos. Arauco necesita un juez, pero qué pasa si estuviera enfermo, tiene que subrogar un juez de familia. Con el uso de esta tecnología, el magistrado puede estar inmediatamente allá".

El equipo creativo continuará en el trabajo para nuevas ideas y, sobre todo, para incentivar al resto de tribunales para su modernización.

"Más allá de los fallos, los usuarios están satisfechos con la atención que el juzgado otorga".

Andrea Caro,, presidenta del Juzgado de Familia de Coronel"

12 años es la edad máxima permitida para un niño dentro de la sala de juegos.