J. Pablo Fariña López
Nuevamente dos buses, en un lapso de tres días, quedaron atrapados en las curvas de la Cuesta Caracol en Tomé, generando un alta congestión de vehículos en el principal acceso al balneario. Esta situación ha sido recurrente durante este verano, generando molestia y preocupación en los vecinos de la comuna, quienes dicen sentir que este ingreso a la ciudad es riesgoso.
Sobre el tema, Gonzalo Reyes, presidente de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Tomé, indicó que "sentimos que este acceso a Tomé ya cumplió con su vida útil, porque es usual que camiones o buses queden atascados, como ha ocurrido en los últimos días".
Agregó que "como tomecinos la Cuesta Caracol tiene un romanticismo, ya que uno puede ver el paisaje o la playa mientras se avanza por las curvas, lo que no es tan agradable cuando te toca estar horas metido en un taco".
Respecto a esta necesidad, el dirigente señaló que "se requiere un nuevo ingreso que sea más expedito. En época de vacaciones aumenta la población flotante en la comuna y cuando hay problemas en ese lugar se generan tacos enormes, hasta que se habilita una pista de la Subida Pirámide (salida de Tomé a Conce)".
Marcada por tragedia
Un accidente que marcó la Cuesta Caracol fue cuando los 16 hinchas de O'Higgins perdieron la vida la madrugada del 9 de febrero del 2013, luego que el bus que los transportaba se desbarrancara.
La tragedia ratificó que la falta de experticia y conocimiento de este ingreso puede ser fatal y sobre ese aspecto Bernardo Montoya, presidente de la Federación de Buses Conce-Tomé, opinó que "hay tres o cuatro curvas complicadas en un tramo corto, pero muy peligroso, y al menos no hemos tenido que lamentan accidentes fatales desde lo que pasó el 2013. Han pasado nueve años y uno todavía ve como se mantienen las dificultades".
Añadió que "para los tomecinos no es mayor drama bajar la cuesta, pero no podemos pensar que solo la gente de acá la va usar, más siendo una ciudad turística. Cualquier anomalía allí nos deja prácticamente aislados. Se necesita un nuevo ingreso a Tomé y no veo que sea efectivo seguir insistiendo con arreglar la Cuesta Caracol".
La autoridad
La Estrella consultó a la Municipalidad de Tomé por la Cuesta Caracol y la complicación que genera entre los habitantes de la comuna en los casos evidenciados, pero no obtuvo respuesta. Por su parte, desde la Seremi de Obras Públicas, que está a cargo de dicho acceso, se indicó que se reforzará la demarcación de las curvas dentro de una mantención general de la ruta, agregando que no hay proyectos de mayor envergadura para modificar el principal ingreso al balneario.
El seremi Daniel Escobar señaló que "junto a un reforzamiento en la demarcación, estamos estudiando la posibilidad eventual de un ensanchamiento en algunas curvas si la geografía lo permite. El llamado a los conductores es a la precaución y no ir a exceso de velocidad, ya que esa ruta no es una autopista y tiene bastante señalética que así lo indica".
"No podemos pensar que solo la gente de Tomé va a usar la cuesta, más siendo ciudad turística".
Bernardo Montoya, presidente Federación de Buses"