Los maestros revelan cómo ha ido cambiando "la constru"
En su día, los trabajadores de la construcción contaron cómo las mujeres y los migrantes se han ido sumando a un rubro que, pese a sus dificultades y desafíos, mantiene el humor y la camaradería a flor de piel.
Leonardo Pizarro, un chorero con más de 20 años de experiencia en el rubro de la construcción, puede decir con toda propiedad que es el mejor maestro de Chile.
"Nunca había concursado ni menos ganado nada" comenta Pizarro, espontáneo y chacotero, como un fiel exponente chileno del oficio.
Durante el verano, y aprovechando que su familia estaba de vacaciones en Santiago, el maestro especialista en ampliaciones y remodelaciones decidió participar de la Feria de Capacitación para Especialistas que organiza la empresa Sodimac.
"Al principio había que contestar una prueba por Internet, después mandaron otra, y entonces me llamaron para decirme que era uno de los 20 seleccionados de Chile", cuenta, aunque confiesa que tenía mucha desconfianza de la llamada "igual que el chiste del Bombo Fica, lo encontré sospechoso, porque en estos días no se sabe".
Tras dos días de cumplir con diversos desafíos y etapas, llegó a la última pregunta de un cuestionario, "no me la sabía, no me acordaba, y le pedí al de arriba que me soplara, y respondí cuando faltaban dos segundos".
Pizarro se ganó el reconocimiento de sus pares y, además, una camioneta cero kilómetro que va a recibir en los próximos días, pero lo que realmente lo alegra es saber que sus clientes han sido su mejor aliado. "Hace un tiempo mandé a hacer 5 mil tarjetas de presentación y la verdad es que sólo he repartido unas 100, el resto han sido puras recomendaciones", dijo.
Sentado en su casa, en Brisas del Sol, Pizarro confidencia que "lo que de verdad me importa es relacionarme con los clientes, rescatar algo que se he perdido, que eran los médicos de la familia; creo que sería bonito que las familias tuvieran un maestro de cabecera".
Él por lo menos se la juega por eso, y no sólo cumple con trabajos garantizados y realizados con contrato de obra menor, sino que además los asesora gratis, cuando se lo piden.
"En construcción no se puede inventar la rueda, pero sí innovar en el proceso de cómo se hacen los proyectos", asegura el mejor maestro chileno.
El día del maestro
A varios kilómetros de allí, pero también en Talcahuano, los trabajadores de la construcción celebraron su día, en la obra del nuevo edificio de la Dirección de Desarrollo Comunitario chorera.
En la ocasión, el maestro Joel Rojas, fue distinguido como el mejor trabajador de su empresa. "Vivo en Tomé y antes trabajaba en la fábrica Bellavista. Cuando la empresa se fue a quiebra, tuve que partir de cero en la construcción".
Rojas se mostró feliz con el premio, y aseguró que "yo soy maestro carpintero y trabajo con un grupo de personas que de verdad es muy bueno".
Mujeres maestras
Entre esos ellos se desenvuelve diariamente Roxana Castillo, que lleva poco más de un año trabajando como electricista. "Hay poca presencia femenina todavía, pero sí se ve más que antes", sostiene.
"Tengo seis compañeros y sólo puedo decir cosas positivas, en general, los viejos ya se han adaptado y están acostumbrados a que hayan mujeres en la obra", acotó.
Edual Pierre, haitiano avecindado en Chile hace un año y 4 meses, también encontró un lugar en la construcción, la que le ha permitido laborar de manera ininterrumpida prácticamente desde que llegó.
Relata que "primero trabajé en cerámica, pero ahora estoy instalando ventanas. Se pasa bien con los compañeros, hartas bromas, se pasa bien, la mayoría de los chilenos son bromistas". Asegura que no ha tenido problema con el idioma, "aunque hablan bastante rápido".
La gente joven siempre va renovando las caras en la construcción. Es el caso de Johnny Escobar, que vive en Los Cerros de Talcahuano, y que trabaja desde los 20 años.
"Ha ido cambiado la gente que trabaja en la construcción", asegura Escobar agregando que, "antes las mujeres, por ejemplo, llegaban al final del día a hacer el aseo, pero ahora tengo una colega electricista también".
Lo que no ha cambiado es el buen humor de los maestros. "El ambiente en la pega es siempre con la talla, pero siempre con respeto entre los trabajadores", afirmó a La Estrella.
"Creo que sería bonito que las familias tuvieran un maestro de cabecera en quien confiar".
Leonardo Pizarro,, "Mejor Maestro de Chile 2019""
3 mil 800 maestros participaron de la competencia por ser el mejor de Chile.