Angélica Vásquez V.
Comúnmente en las terapias, mi rol es escuchar y guiar. Me conecto con quien tengo frente a mí, forma parte de mi trabajo. Esa será la diferencia entre lograr que el famoso "click" se haga o no, bueno, eso más otras cosas por cierto, por eso es una Terapia Integral y me agrada haberla personalizado basándome en mi propio estudio de mercado. Atender a una persona de la manera en que yo hubiese querido ser atendida cuando lo pasaba tan mal, o me costaba resolver ciertas situaciones. Y le pongo a esta columna "Espera seis lunes" porque fue uno de los consejos que me dio un compañero de trabajo y me encantó. El tema es privado, lógico, pero qué sorpresa me produce encontrarme cada vez más con gente conectada, lo recibo casi como un regalo. El esperar seis lunes se orienta en este caso a ponerme un plazo personal para algo que tengo que resolver, pero poder conversar... la fuerza y el poder de la comunicación envueltas en buenas vibras produce sí o sí resultados favorables. Cuando realizas terapias, haces radio motivacional y todo lo enfocas con un aire más optimista, eso mismo causa que cuando uno pregunta por asesoría o dice que está confundida en algo de pronto quien te escucha decirlo se pregunta ¿por qué si hago terapias me pasa eso? Lo entiendo, sólo recordar que la empatía ayuda mucho. No somos los Avengers, no soy tampoco la Mujer Maravilla. Es verdad que se aplican herramientas, técnicas, y espacios de silencio que van ordenando todo, pero expresarse y manifestarse sigue siendo una opción. Lo lindo es que como inevitablemente las energías y vibraciones se alinean, me encuentro cada vez más con personas así. "Conectadas". Así que estimados lectores, no se desanimen si aún no encuentran lo que buscan, ese también es un camino que les ha sido dado, lo fue para mí, lo ha sido para todos. ¿O creen que la vida se olvidó de ustedes? Jamás, y esta era, estos ciclos, esta nueva conciencia nos recuerdan día a día lo contrario.