Alfonso Levet G.
Que se concrete una plataforma social para dar ayuda a los empleados de la pesca industrial que han sido desvinculados, exigieron los representantes de los trabajadores de diversas empresas.
Robinson Cárcamo, dirigente de la Federación de Sindicatos de la Industria Pesquera (Fesip), fue uno de los dirigentes que ayer llegó hasta la sede del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence) para interiorizarse de las posibilidades de cursos, en busca de la reconversión laboral.
Sin embargo, Cárcamo reconoció que preferiría regresar al trabajo en la industria pesquera, aunque fuera en otras funciones. "En otra empresa, difícilmente vamos a tener los niveles de remuneraciones que hoy tenemos en la industria pesquera. No los vamos a encontrar en otra industria, a menos que tengamos alguna competencia mayor", señaló.
En ese sentido, el dirigente valoró la oferta de becas de capacitación. "Hoy día tenemos 500 personas a punto de capacitarse y, si se suman 500 más, nos ayuda a paliar la grave situación que hoy tenemos", planteó.
Respecto del perfil de los operarios desvinculados, Cárcamo dijo que "son personas que no tienen grandes competencias en otras áreas, son trabajadores que filetean, que operan prensas, y esos trabajos no los encuentras en cualquier parte", detalló.
Elena Fuentes, presidenta del sindicato de una planta de crustáceos ubicada en Tomé, aseguró que, aunque su área no está directamente afectada hasta ahora, hay inquietud entre las trabajadoras.
"Mucho temor tienen mis compañeras porque así como pasó con la jibia, ahora viene el tema de la merluza y nosotros somos pesca de arrastre, como fauna acompañante viene merluza. Estamos bien complicadas en el tema", aseguró la dirigenta.
Fuentes afirmó que "como ya se vio en el Congreso, no tenemos por dónde ganar, están todos en contra de nosotros. Dicen 'es la industria', pero no piensan que detrás de la industria estamos nosotras, y somos la mayoría jefas de hogar que necesitamos trabajar para poder sostenernos".
Reconversión
Oscar Aliaga, director regional del Sence, aseguró por su parte que el organismo ya viene avanzando en capacitar a trabajadores desvinculados por la industria pesquera.
"En aproximadamente dos semanas vamos a partir con un primer plan de capacitación, en alianza con el fondo de administración pesquero, para personas que ya han sido seleccionadas", aseguró.
Aliaga detalló que actualmente hay 8 cursos, "pero nos hemos comprometido a estudiar algunas necesidades locales de empleabilidad que los propios dirigentes han planteado".
Entre los cursos ofrecidos están guardia de seguridad, fabricación de ventanas termopanel, logística de distribución, auxiliar de servicios gastronómicos, pastelería, asistencia turística y garzón.
En total, hay 1.000 cupos para la industria pesquera, además de otros 400 para personas que podrían acogerse a las becas del fondo de cesantía solidario.
"Mis compañeras tienen temor (...) como pasó con la jibia, ahora viene la merluza".
Elena Fuentes, dirigenta