Peregrinos piden a la Virgen por paz y equidad para Chile
Sobre cien mil fieles asistieron durante la mañana y la tarde del domingo. Incluso se agregó una misa más a lo que estaba programado, debido a la gran cantidad de personas que aún subían el Cerro La Virgen a eso de las 18.30.
Más de cien mil personas subieron el Cerro la Virgen en el Día de la Inmaculada Concepción, en la que los fieles llegaron al campo de oración y pidieron por paz y equidad en el país. Ni el calor ni la difícil subida al cerro fueron impedimento para que familias de diversas ciudades caminaran hacia la Virgen para hacer o pagar mandas.
Si bien la última misa que comúnmente se realizaba a las 18.00 se adelantó a las 16.30 por pedido de vecinos de Lo Pequén y aledaños, la gran cantidad de personas generó una nueva misa pasadas las 18.30.
Además, fue una buena jornada para comerciantes que se instalaron en Plaza Juan Bosco y a lo largo de calles Luis Urrutia Manzano y La Virgen. Vendieron desde velas y rosarios hasta alimentos y bebestibles.
Pedidos y balance
Francisco Román subió al campo de oración a eso de las 14.00 horas junto con su familia. "La gente se vio tranquila y ya es una costumbre desde niño para agradecer lo que hemos vivido como familia", sostuvo, agregando que "lo principal es la unión y entregar amor al que lo necesite para tratar de que se solucione el momento difícil que está viviendo el país. Es un momento especial para reencontrarnos entre todos".
Nancy Becerra se detuvo a la mitad del camino para descansar. "Hay mucho calor, pero vale la pena ver a la Virgen y pedir por mi familia y por todos. Este día es muy especial", dijo.
La peregrina viajó desde San Pedro de la Paz y sostuvo que "la fraternidad y la compañía puede servir para acercarnos más como chilenos. Todo nos sirve".
María Barra soportó sus dolores musculares para llegar al campo de oración. "Estoy esperando a familiares para continuar. Lo único que pido es paz para todos, no para un lado ni para el otro. Todos somos personas", señaló la mujer. Y argumentó que "las madres sufrimos cuando ocurre algo como esto, pero la vida es así".
Desde Penco llegó Silvia Saavedra junto con su marido. "No viajo seguido a Concepción. Mis piernas me duelen mucho, pero tengo que venir este día. Sólo pedí que esté todo mejor en Chile y que ojalá haya paz y equidad, que quienes somos de la tercera edad podamos vivir mejor".
En tanto, Ignacio Álvarez, joven hincha de Deportes Concepción, contó que "pedí que ascendamos el próximo domingo. Mi familia me dice que estas instancias no son para pedir estas cosas, pero creo que todo puede ayudar. Tengo mucha fe".
En cuanto a la evaluación de la jornada, Carmen Martínez, presidenta de la junta de vecinos N°29, dijo que "hasta el momento no nos ha llegado ninguna queja de los vecinos".
Luego que la Corte de Apelaciones no admitiera el recurso de protección por parte de los vecinos contra el Arzobispado para acotar el horario, Carmen Martínez dijo que "nos enfocamos en la organización en conjunto con Conaf, con el Arzobispado y el municipio. Hasta ahora ha salido todo bien".
Monseñor chomali
En la misa de las 16.30, el arzobispo de Concepción, Fernando Chomali destacó la importancia de la Virgen María y que "tal vez el gran compromiso que podemos asumir hoy es el ser hombres y mujeres de oración. Si nos comprometemos a tener una vida espiritual de oración conforme al querer de Dios, otro Chile será posible, tendremos otro país con personas espirituales llamados a servir y no ser servidos, a tener una vida humilde y sencilla".
Agregó que "pedimos al Señor para que nos ayude a construir el país que le queremos dejar a las futuras generaciones. En estos tiempos que hemos vivido, ya no podemos darnos el lujo de criticar a las generaciones que nos dejaron ni tampoco estar siempre añorando cómo eran las cosas. Ese es el camino que tenemos que emprender".
"Mis piernas me duelen mucho. Pedí que todo esté mejor en Chile y que haya paz y equidad".
Silvia Saavedra,, peregrina que viajó desde Penco.
Dedicatoria
El arzobispo Fernando Chomali recordó en la misa al Presbítero Ángel Jiménez Valdebenito, quien falleció este domingo a los 91 años. Fue párroco durante 26 años en Nuestra Señora de la Candelaria en Tomé. Además, se celebró una misa en su honor este domingo a las 19.00. Sus funerales se realizarán este martes 10 de diciembre a las 10.00, en la catedral penquista.