Pablo Martínez Tizka

Veinte familias evacuadas y dos viviendas destruidas son las momentáneas consecuencias de los incendios forestales en Santa Juana, específicamente en los sectores Curalí Alto y Diñico.

La emergencia, que aún no está controlada, preocupa a los vecinos del sector, quienes piden ayuda con abastecimiento de agua. No obstante, agradecieron la presencia de brigadistas y de Bomberos para combatir los siniestros.

Una de las casas destruidas fue la de Luz Flores, quien vivía con seis familiares. "El incendio no empezó en este sector, sino que al frente. Vimos humo y con mi hija bajamos. Era solo fueguito, pero de todas maneras llamamos a los bomberos por si las llamas llegaban a las viviendas", dijo.

"Después viene un viento muy fuerte y el fuego se expandió, saltó como una chispa y después se formó un remolino. Antes de que el fuego llegara aquí, alcanzamos a subir porque mi mamá estaba en la casa", continuó.

Tras eso, llegaron brigadistas a dar la alarma a Flores. "Uno de ellos me dijo que teníamos que evacuar porque las llamas ya llegaron al sector. En cosa de minutos, el fuego invadió la casa", señaló.

Sobre las consecuencias, Luz Flores contó que "vivíamos siete personas, pero habíamos tres en el momento porque mi nieta pequeña no estaba y el resto estaba trabajando. Por suerte no nos pasó nada, pero se quemó todo. Pasamos la noche en un hostal y nos iremos donde una sobrina. El alcalde nos ofreció ayuda".

Juan Reyes fue otra de las personas que evacuó. Dijo que "nos fuimos al tiro porque el fuego podía pillarnos. Vimos a los aviones tirar agua, pero estuvimos alerta igual porque el viento podía cambiar muy rápido. Por ese motivo no dormí nada".

Vicente Benavides agregó que "yo llegué tarde, cuando ya el fuego había avanzado y estaba pasando muy cerca de las casas. Ayudé junto con otros vecinos de Curalí a evacuar objetos. Por suerte esos hogares no fueron destruidos, pero hay bastante necesidad de agua en el sector. Muchos vecinos lo piden".

Alcalde y conaf

Ángel Castro, alcalde de Santa Juana informó que "respecto a las familias, estamos con dos albergadas. Una se fue a casa de familiares y otra estuvo en el albergue municipal, también hubo un adulto mayor trasladado a un hospital para controlar su presión".

Respecto al abastecimiento de agua, el jefe comunal indicó que "se está realizando un catastro en terreno con el área social del municipio para ir en ayuda de ellas".

Desde el municipio se agregó que hasta la tarde, el total de hectáreas quemadas en Santa Juana es de 480.

Respecto a los incendios forestales, el director regional de Conaf, Juan Carlo Hinojosa señaló que "ha sido muy importante el esfuerzo de los brigadistas y de 10 compañías de Bomberos, lo que impidió que se quemaran más casas. El caso de Santa Juana es el más complicado, ya que en Mulchén y Nacimiento hay un mayor control. En Membrillar (Cabrero) todavía hay combate".

Turnos éticos

Felipe Araneda, presidente del sindicato de brigadistas forestales de Conaf, se refirió a la jornada de incendios y a la actual paralización por mejores salarios y equipamiento.

"Si bien continuamos en paro, dispusimos del 90% de las brigadas durante la noche del jueves para evitar que las casas se quemaran, aunque lamentablemente eso ocurrió. En la mañana del viernes tuvimos cuatro brigadas para evitar mayores riesgos. Si no dan abasto, se unirán más".

Respecto al estado de la paralización, Araneda señaló que "pudimos hablar con el director nacional de Conaf y tendremos una reunión el 24 de enero. Esperamos obtener una respuesta positiva antes de esa fecha para deponerla".

"El brigadista nos dijo que teníamos que evacuar porque el fuego ya había llegado al sector".

Luz Flores,, vecina santajuanina