Historiadora adelanta detalles de su actividad en "Puerto de Ideas"
Bárbara Silva ahondará en la relación de la sociedad y la ciencia en el cierre del primer ciclo de festival en vivo.
Este martes llega a su fin el primer ciclo de conferencias #PuertodeIdeasEnVivo y lo hará con una actividad denominada "La ciencia y las enfermedades o la historia de las (in)certezas", a cargo de la Doctora en Historia de la Universidad Católica de Chile y académica de la Universidad Alberto Hurtado, Bárbara Silva.
"No quiero que se vaya a entender que lo que voy a hacer en la actividad del martes es una historia de las enfermedades, porque para eso hay colegas muchísimo más preparados que yo, sino que a propósito de esta situación invitar a pensar qué desafíos nos pone esta relación entre ciencia y sociedad", sostiene al teléfono la autora de "Estrellas desde el San Cristóbal" (Catalonia, 2019).
Perspectiva histórica
Uno de los efectos que ha tenido la propagación del covid-19 por el mundo es el miedo. No sólo a ser contagiado, sino a morir por efecto de este, ya que conocemos muy poco de su comportamiento y buscamos respuestas en la religión, en la historia y en la ciencia.
"Cuando una sociedad se enfrenta a una situación crítica en el fondo va a buscar las herramientas con la cuales se vincula de manera más estrecha y en las cuales tiene confianza", asegura Silva y acota que "hoy en día esa es la ciencia, o las ciencias en plural".
Para la especialista en historia de la ciencia y la tecnología, el problema es que en este acercamiento a la ciencia, "le demandamos tiempos que no son de la ciencia. Queremos una respuesta ya, ahora, yo también la quiero por supuesto. Pero el conocimiento científico no se produce de un día para otro", sostiene.
Y explica, de paso, la razón por la que han surgido reportajes de pandemias pasadas que han tenido tanto eco en nuestra sociedad. Desde su perspectiva recurrimos a casos como la gripe española de 1918, y la de la influenza de 1957-1959 para "ver qué es lo que hemos hecho en el pasado. No porque ahí vayamos a encontrar una receta o una solución, sino que en este acto muy instintivo de ir a buscar dónde puede haber alguna respuesta que en el fondo ayude con las incertidumbres de hoy día", en el sentido que te va a ayudar a la certidumbre que "la humanidad ha enfrentado otras situaciones así y ha sobrevivido".
Otra búsqueda dice relación con la religión. Hace poco en redes sociales comenzó a correr la historia del Cristo de Mayo, al cual lo rodea la leyenda que si no se le saca en procesión ocurren graves tragedias como la acaecida en el terremoto de 1647.
Si bien, hoy por hoy la mayor parte de la población recurre a la ciencia en busca de explicaciones, lo cierto es que se convive sin problemas con las creencias hasta el día de hoy.
"El desarrollo científico, sobre todo durante el siglo XVII, XVIII y de ahí en adelante, fue anclando esa mayor confianza en la ciencia, pero muy lentamente, muy de a poco. Todavía las religiones, en general, tenían una adhesión muy importante de parte de la sociedad. Entonces, esto no significa que se reemplace un paradigma por otro, sino que conviven coexisten. Incluso hasta el día de hoy", detalla Bárbara Silva.
Acceso a información
El terremoto de 2010 sorprendió a casi todo Chile con mayor acceso a internet y las redes sociales. Esto, a la larga, implicó que hubiese una mayor exposición a las explicaciones provenientes de la ciencia.
Aspecto que en esta pandemia se ha exacerbado. "Estamos frente a dos pandemias: una, la del virus; y otra, la de los volúmenes de información, alguna confiables, otra muy poco confiable", manifiesta la doctora en Historia.
A esto se suma otro punto: "En esta búsqueda de que algo te dé respuesta, las redes sociales tienen un problema que en el fondo te va mostrando publicaciones, posteos, etc. , de aquellos que piensan como tú, según tu historial de comportamiento en las redes sociales (…). Ese es un fenómeno nuevo".
"Por otra parte -continúa Silva-, lo que nos está mostrando esta infodemia, como la han llamado, es que tenemos mucha capacidad de producción de conocimientos científicos, pero cómo los sociabilizamos. Es una de las grandes preguntas que está hoy sobre la mesa".
Según dice, "necesitamos una mayor comunicación de la ciencia", el obstáculo es cómo se realizará la divulgación: "¿Le vamos a pedir a los mismos científicos que además de la investigación aborden esa tarea de sociabilizar el conocimiento científico?".
Otro tema que hay que abordar son los presupuestos en torno a la investigación científica. En especial, porque el tema si es sólo enfocarse en el tema científico duro -en cuanto a investigación epidemiológica, virológica o biomédica-, o abrirse a otras áreas.
"Necesitamos investigación en otras áreas del conocimiento, de entender por qué nos cuesta tanto el encierro, qué es lo que nos genera como sociedad, y una vez que se levanten las cuarentenas cómo reconstruimos los tejidos sociales", sostiene la académica.
En el fondo su actividad es una invitación a reflexionar "no solamente cómo nos hemos relacionado con la ciencia en el pasado, sino cómo nos podemos relacionar con la ciencia y con la investigación científica, ampliamente entendida, a futuro".
La doctora en Historia Bárbara Silva estará acompañada por Polo Ramírez para establecer un diálogo, y luego habrá un intercambio de preguntas y respuestas con el público.
"Cerramos este primer mes de Puerto de Ideas En Vivo entusiasmados con el intercambio que hemos construido con nuestro público y su activa participación a través de las redes sociales", asegura Chantal Signorio, directora de Puerto de Ideas, sobre la actividad que cuenta con el apoyo de Escondida | BHP.
"Cuando una sociedad se enfrenta a una situación crítica en el fondo va a buscar las herramientas con la cuales se vincula de manera más estrecha y en las cuales tiene confianza (...) hoy en día ésa es la ciencia".
Bárbara Silva, Doctora en Historia