Explosión dejó a la mitad de Beirut con daños: "Fue como Hiroshima"
Bodega que tenía material inflamable estalló y la onda expansiva se extendió por unos 10 kilómetros. Hasta anoche iban más de 70 fallecidos y casi 4 mil heridos. El gobierno prometió que "los responsables pagarán el precio".
Leo Riquelme
La imagen del gobernador de Beirut rompiendo en llanto frente a las cámaras fue elocuente de la desgracia que vivía en ese momento la capital del Líbano, que al atardece r de ayer fue sacudida por una gigantesca explosión en unos almacenes portuarios por causas aún no aclaradas.
"Esto es un desastre nacional parecido a Hiroshima", dijo Philip Boulos, quien estimó que la onda expansiva generó daños en la mitad de la ciudad. La serie de videos que captaron el hecho muestran efectivamente un enorme hongo, al estilo del que dejaron las bombas que Estados Unidos lanzó en Japón en 1945 durante la Segunda Guerra Mundial.
Beirut es una ciudad pequeña, con un millón de personas pero altamente densificada pues su extensión es de sólo unos 20 kilómetros cuadrados. Las autoridades locales dijeron que el impacto se percibió a 10 km a la redonda.
"Nunca en mi vida he visto un desastre tan grande. No sabemos cómo nos vamos a recuperar de esto. Tenemos que mantenernos fuertes, tenemos que ser valientes", agregó Philip Boulos.
Hasta anoche la cantidad de fallecidos superaba las 70 personas e iban más de 3.600 heridos, que colapsaban los centros asistenciales. De hecho, la Cruz Roja llamó a quienes no se vieron afectados a que donen sangre.
Expertos dijeron que la tragedia pudo ser aún peor si no existiera el contexto de la pandemia por el coronavirus, pues la zona afectada suele tener muchos más turistas en épocas normales de los que había ayer.
Hasta anoche no estaba claro el origen. Organizaciones terroristas negaron cualquier relación y la tesis de un accidente cobraba fuerza.
Una de las hipótesis que se investiga, según la agencia estatal de noticias, es que un incendio afectó a una bodega de trigo, pero el fuego pasó a una bodega en que presuntamente se acopiaba desde 2014 material inflamable como nitrato de sodio, que se usa para fabricar explosivos y combustible sólido de cohetes.
"Lo que sucedió hoy no pasará sin que se rindan cuentas. Los responsables de esta catástrofe pagarán el precio", dijo el primer ministro Hassan Diab en una comparecencia televisada.