Este mes parte reclutamiento de 5 mil voluntarios para tres vacunas en Chile
Los desarrollos de Sinovac, Oxford y Janssen, que figuran entre los más avanzados en el mundo, están ad portas de iniciar los estudios clínicos en el país. Este último usará los Cesfam de Colina y San Bernardo para enrolar pacientes.
La carrera mundial por dar con la vacuna contra el Covid-19 está ad portas de comenzar a correrse en Chile, pues al menos tres desarrollos prometedores iniciarían este mes sus estudios clínicos en el país, última etapa antes de poder comenzar su fabricación en masa.
Se trata de las iniciativas impulsadas por la china Sinovac, la belga Janssen y el consorcio anglo-sueco de la Universidad de Oxford y AztraZeneca, tres de los desarrollos más avanzados en el globo y que están ultimando sus certificaciones en nuestro país para comenzar con la convocatoria de voluntarios.
Entre los proyectos que se someterán a prueba se estima que se requerirán más de 5 mil personas que reciban dosis de la vacuna o de un placebo, para luego hacerles seguimiento y corroborar su eficacia protectora y su bajo riesgo.
"Casi todos los protocolos siguen un esquema similar de reclutamiento de voluntarios, aunque con algunas diferencias", cuenta el doctor Miguel O'Ryan, miembro del consejo asesor en vacunas y uno de los líderes del estudio clínico que se desarrollará con el proyecto belga.
Janssen, laboratorio de la estadounidense Johnson & Johnson, ha informado que requerirá 60 mil voluntarios a nivel mundial, aplicando estudios clínicos en países como España, Brasil y Perú, fuertemente afectados por el covid.
En Chile la convocatoria apuntará a enrolar mil voluntarios, todos mayores de 18 años, en un proceso que podría iniciar la próxima semana. Antes, el protocolo debe ser aprobado por el Instituto de Salud Pública (ISP) y tiene que ser visado por el comité de ética de la Universidad de Chile, institución que impulsará el ensayo y que esta jornada sometería a análisis la planificación de sus docentes.
O'Ryan detalla que para la inoculación se capacitará a más de 30 profesionales de la salud para una correcta vacunación y seguimiento de casos durante los dos años que durará el estudio. En ese lapso se harán envíos de datos a la firma belga para que gestione su aprobación de emergencia si alcanza prematuramente índices de eficacia, aunque el monitoreo seguirá.
El proceso se desarrollará en el Hospital Exequiel González Cortés de San Miguel y en los Cesfam Colina y Esmeralda, de Colina; y Joan Alsina de San Bernardo. En todos se priorizaría ensayar en el personal de salud, aunque en la última se incluiría a vecinos y trabajadores de una empresa de alimentos de la zona.
"Nos sentimos orgullosos. Es un honor y un reconocimiento a nuestra salud comunal", destacó el alcalde sambernardino Leonel Cádiz. Según dijo, no duda que sus vecinos participarán del estudio e incluso no descartó ofrecerse de voluntario si es requerido. "Es una oportunidad importante en la vida poder contribuir en este proceso", dijo.
Sinovac y oxford
Otro desarrollo que podría partir el reclutamiento próximamente sería la vacuna del laboratorio Sinovac, cuyo ensayo clínico lidera la Universidad Católica.
El vicerrector de investigación de la UC, Pedro Bouchon, comenta que en estos días resolverán dudas al protocolo hechas por el ISP y luego, tras recibir el visto bueno, se podría iniciar la convocatoria de los más de tres mil voluntarios que contemplan. Serán todos mayores de 18 años y menores de 59.
Quienes se sometan a este estudio recibirán dos dosis del virus inactivado o de placebo, y serán monitoreados por 18 meses. En una primera etapa se trabajará con personal de salud, pero luego se considerará a público general.
"En paralelo estamos afinando el consorcio de universidades que participarán para llevar a cabo el proceso", explica Bouchon, enfatizando que las pruebas cubrirán otras regiones además de la RM.
Más en reserva se mantiene el estudio de Oxford, cuyos gestores han evitado dar detalles de su implementación hasta que el protocolo se someta esta semana a la evaluación de un comité de ética. De lo que se sabe a la fecha, la Universidad de Chile llevaría la batuta de su implementación bajo la tutela de la académica María Elena Santolaya, quien a fines de agosto dio algunas luces del ensayo.
Según detalló al sitio web de la casa de estudios, la inoculación se hará en tres puntos de Santiago y uno en Valparaíso, donde se aplicarán dos dosis de la vacuna a cada voluntario, separadas por un mes. A diferencia de las otras, éste proyecto admitiría mayores de 60 años.
El reclutamiento partiría este mes y requeriría de mil personas, aunque podrían ser más pues el laboratorio AstraZeneca, que trabaja junto a Oxford, comentó en La Tercera que contemplan tres mil voluntarios en Chile, cuya inoculación estaría impulsada por la Clínica Las Condes y comenzaría "en breve".
"El objetivo de esta estrategia es asegurar el acceso oportuno y equitativo a una vacuna cuando exista un desarrollo exitoso", acotó el ministro de Ciencia, Andrés Couve.
¿cómo actúan?
Los académicos que lideran los ensayos de Janssen y Oxford afirman que ambas vacunas usan como base un adenovirus, que es un tipo de virus que infecta pero sin producir enfermedad y que se puede modificar para que no se replique. Éste es introducido al organismo junto a un segmento genético del Sars-Cov-2 "como si fuera un caballo de Troya", explica Miguel O'Ryan, a fin de que el sistema lo detecte y genere el anticuerpo. Pedro Bouchon cuenta un mecanismo similar en el desarrollo de Sinovac: un virus inactivado: "Es una estrategia clásica".