Pablo Martínez Tizka

La reinvención también ha formado parte del esfuerzo que se han realizado desde los Centros de Salud Familiar (Cesfam) en la región del Biobío. Tanto trabajadores como directores de salud municipal aseguraron que la cantidad de público presencial ha disminuido, ya que han comprendido las consecuencias de la pandemia.

Esto ha signficado que prestaciones que no son de urgencia puedan realizarse por internet y, asimismo, se enfatiza la atención a domicilio en algunos casos.

En cuanto a lo odontológico, se especificó que sólo se atienden las urgencias debido al riesgo de contagio que puede implica si se realiza de modo presencial.

Situación de cesfam

Marianela Sandoval es la directora del Departamento de Atención Primaria de Salud del Servicio de Salud Arauco. Señaló que "generamos un plan de reactivación para cada hospital y consultorio de la provincia, de manera que se sepa qué servicios se pueden entregar, ya que tenemos comunas que están en cuarentena y otras que están en Fase 3".

Agregó que "se están priorizando las atenciones del programa de salud cardiovascular porque son quienes tienen más riesgo de descompensarse".

Respecto a las prestaciones remotas o a domicilio, dijo que "se orientan a pacientes postrados, adultos mayores, a la entrega de fármacos. Se han desplegado dispositivos en terreno".

Finalmente, indicó que "lo que es inalterable es la prestación de servicios a embarazadas y la dotación de vacunas".

Miriam Barriga es dirigenta de Confusam en Talcahuano. Aseguró que "la gente ya se acostumbró a asistir al consultorio por un tema puntual o urgente. Esto no ha significado menos trabajo para nosotros, ya que hay mucha labor a domicilio o por internet".

En ese sentido, ejemplificó con la prestación de salud mental. "Las consultas han aumentado bastante y eso se hace de manera remota, lo que se ha reforzado. Además, hay que tomar en cuenta que también realizamos labores de trazabilidad y hay muchos trabajadores que van a domicilios".

Roberto Aguayo, director de Salud Municipal de San Pedro de la Paz, señaló que "la prioridad nuestra es la entrega de medicamento sea presencial o a domicilio. Muchas prestaciones se han tenido que reconvertir y en eso la gente ha sido muy prudente".

Respecto a las filas que se pueden observar en algunos consultorios, Aguayo dijo que "es por la entrega de fármacos. Hay algunas que demoran entre 2 a 3 horas porque el error en la entrega debe ser cercano a cero".

Rosario Bustos, directora de Salud Municipal de Concepción, indicó que efectivamente la atención presencial ha disminuido y que han existido filas por situaciones puntuales.

"En el Cesfam Lorenzo Arenas se vio mucha gente porque había entrega de medicamentos y de alimentos. Aquello lo hemos tratado de mejorar, reforzando la entrega a domicilio", aseguró.

Añadió que "en el SAR Tucapel, por ejemplo, las atenciones de urgencia disminuyeron bastante. En tiempos normales el número es de 140 y en pandemia han bajado a 40 o 50. En agosto subieron un poco, pero no llegaron a esos niveles habituales.

Marina Ascencio, dirigenta Confusam en San Pedro de la Paz, destacó que "se ha reforzado mucho el teletrabajo y eso ha significado que ningún paciente quede a la deriva, aún cuando la demanda fuese alta".

"Entrega de medicamentos, vacunas y controles, eso no se ha detenido, más el trabajo que realizamos en la trazabilidad. Que los pacientes estén bien es nuestra prioridad, aunque también nos gustaría que hubiera más preocupación por nuestros implementos", complementó.

"Las personas ya se acostumbraron a ir al consultorio por un tema puntual o por una urgencia.

Miriam Barriga,, dirigenta Confusam Talcahuano.

140 atenciones en urgencia era lo normal en el SAR Tucapel, lo que ha disminuido en pandemia.