Mario Vera Sepúlveda
Presentar un cuadro grave de coronavirus, definitivamente, no es algo para tomarse a la ligera. Los 22 últimos fallecidos en las últimas 24 horas y los 1665 que se han registrado en la región del Biobío desde el inicio de la pandemia son cifras que no dejan indiferente a nadie.
Otro antecedente que lleva a la precaución son las consecuencias de padecer un cuadro grave de covid-19, el cual puede dejar secuelas físicas y psicológicas.
"La sedación, junto al bloqueo neuromuscular te predispone a otros riesgos como las alteraciones óseas, musculares, hay un síndrome que se llama el daño adquirido en UCI, el hecho que tengan un tubo endotraqueal puede generar daños en las cuerdas vocales, puede generar alteración para tragar, que es la disfagia alteración de la comunicación y todo este conjunto de cosas puede generar un daño cognitivo también", detalló la doctora Andrea Araneda, médico fisiatra del Hospital Las Higueras.
La especialista contó que para minimizar los efectos secundarios de la intubación, el equipo multidisplinario, trabaja desde que el paciente es intubado, siendo catalogado en distintos niveles como agudos, subagudos y recuperación postaguda. Eso sí, aclara que "hay pacientes por ejemplo desde el año pasado tuvieron covid, y todavía están en rehabilitación, porque el proceso en ellos es mucho más lento. Entonces no hay una fecha establecida para saber cuánto durará la rehabilitación".
En este proceso, señala la doctora Araneda, intervienen idealmente kinesiólogos, terapeutas ocupacionales, fonoaudiólogo y el médico fisiatra.
Cuenta que una vez dados de alta los pacientes, son seguidos por un médico broncopulmonar "para evaluar el daño pulmonar y respiratorio con el cual pueden haber quedado".
También son controlados por un médico fisiatra, el cual deriva a otros profesionales, "según el daño que tenga cada paciente", indicó, la doctora Araneda,
Finalmente dijo que las terapias a seguir pueden ser tanto presenciales como remotas, siendo esta alternativa desarrollada con elementos que se encuentren en los hogares de los pacientes.
4 distintos profesionales componen el equipo básico de recuperación de pacientes Covid-19.