Mario Vera Sepúlveda

Uno de los deportes más espectaculares y divertidos es el windsurf, cuyos orígenes hay que buscarlos en la isla de Hawai. Su irrupción provocó una auténtica revolución entre los jóvenes en el mundo de los deportes de verano. Los más intrépidos y avezados lo practican también en los meses de invierno. La práctica del windsurf depende del viento. Cuanto más viento sopla, más técnica y fuerza se emplea.

De acuerdo a Fernando Valle, "hay que mantener una condición física aceptable", pero aclara que "se trata de una práctica deportiva donde se necesita más condición técnica que la fuerza física", explicando que la forma en la cual s logra aprovechar el viento en playas y lagunas es primordial.

Sobre el mismo punto, Valle explicó que para las personas que recién están conociendo la disciplina puede ser un tanto complejo acostumbrarse a la dinámica del windsurf, ya que "no siempre las condiciones del viento son las mejores y eso es un poquito frustrante en esta sociedad donde prima lo instantáneo, lo inmediato. Se necesita paciencia", aseguró.

Sobre las tablas reveló que hay cuatro categorías: Slalom, Course, Olas y Freestyle. "Lo recomendable es que para los principiantes empleen tablas de gran volumen, con orza y vela pequeña para tener que hacer poco esfuerzo".

Aprendizaje

Nicole Sánchez es una amante del mar y los deportes náuticos. Cuenta que lleva algún tiempo practicando el stand up paddle y que ahora se decidió a probar el windsurf, y para ello se acercó a la escuela La Botara, a cargo del profesor Marco Medina.

Sánchez cuenta que le ha costado aprender un poco, ya que "levantar la vela necesita de técnica, y estoy en el proceso de aprender".

Y justamente para eso es que la escuela le proporciona el apoyo con el conocimiento específico de esta especialidad.

Pero no solo lo técnico enseñan en La Botara, sino que también esta escuela de windsurf nacida en enero de 2017, busca "enseñar a vivir la naturaleza a través del deporte".

Sánchez dice que eso se nota en el espíritu del deporte, el cual califica de "muy noble", explicando que el contacto con el entorno, especialmente el agua y el viento la han llevado a "sentir una conexión súper profunda con el medio ambiente, a quererlo y cuidarlo mucho más y que así mis sobrinas en un futuro también puedan disfrutar de estos lugares y estos deportes maravillosos".

Finalmente indicó que la práctica del windsurf ha sido una grandísima experiencia, absolutamente recomendable, "sobre todo en esta época donde el calor nos lleva a querer refrescarnos y qué mejor que estando en medio del mar", reflexionó.

"Se trata de una práctica deportiva donde se necesita más condición técnica que la fuerza física".

Fernando Valle, windsurfer.

La sub 20 de la Universidad de Concepción completó su segunda semana de entrenamientos con miras a la Copa Libertadores de la categoría, torneo al que accedieron tras coronarse campeones de la última edición de la competencia local.

En ese contexto, Bastián Straussmann, ayudante técnico del Campanil, reveló que "se ha hecho una planificación bastante cuidadosa para llegar lo mejor posible a la competencia. Nos encontramos en la segunda semana, todavía estamos en esta etapa de adaptación, ya que hay un tiempo de vacaciones que tuvieron los chicos y si bien hay una merma en lo técnico y físico, ya estamos nivelando esos aspectos y vamos bien encaminados".

Son 25 jugadores los que están luchando día a día para integrar la lista final de 20 representantes, que viajarán a Ecuador para defender la camiseta del Campanil en la Copa Libertadores Sub 20. "Todos quieren estar y desde ese lado hay una motivación", indicó Straussmann.

Cabe recordar que la Copa Libertadores sub 20 se desarrollará entre el 5 y 20 de febrero en el estadio Atahualpa de Quito. El Campanil integra el grupo C de la competencia.