La extracción de áridos lidera en proyectos de calificación ambiental
Expertos señalan que en la región del Biobío hay una concentración de estas iniciativas, más que en otras.
Ocho proyectos de extracción de áridos y greda están actualmente en el proceso de calificación ambiental en el Servicio de Evaluación Ambiental de la Región del Biobío.
Este rubro lidera, en conjunto con el inmobiliario, en la cantidad de iniciativas presentadas como Declaración de Impacto Ambiental (DIA), a la espera de ser aceptados.
De estas ocho iniciativas, tres de ellas son en la provincia de Concepción y, en específico, dos en Penco con los proyectos "Extracción y procesamiento de áridos Cantera El Pellín" y "Extracción y procesamiento de áridos, Cantera Fundo Landa".
La otra declaración corresponde a "Extracción de áridos desde el Río Biobío en San Pedro de la Paz", presentada en junio de 2021.
Expertos
Claudio Valdovinos, investigador del Centro Eula, explicó que incluso hay más iniciativas de extracción de áridos, pero que aquellas de mayor tamaño son las que deben ingresar una declaración o un estudio de impacto ambiental.
"Los proyectos más chicos no ingresan al Sistema de Evaluación Ambiental, pero pueden ser abundantes en las zonas de los ríos", señaló.
En cuanto a los impactos ambientales, el experto indicó que depende del lugar en el que se realice. "Hay ciertas áreas de los ríos y los bordes costeros que son más sensibles, dada su biodiversidad. Gran parte de las extracciones de áridos se localizan en ríos de mucha pendiente con fondos de bolones de roca. Menos sensibles son las extracciones de áridos de arena, como las que ocurren en la parte baja del río Biobío".
A partir de ahí, indicó que los efectos son múltiples. "El más importante es la alteración del hábitat acuático. Otro impacto es el aumento de la turbiedad del agua, dado el proceso mismo de extracción. Asimismo, puede afectar captaciones de agua potable".
Finalmente, indicó que "hay una concentración gigantesca de extracciones de áridos, sobre todo en las regiones más industrializadas como la Región del Biobío. La distribución no es homogénea en comparación con el resto del país".
Heraldo Norambuena, biólogo e investigador del Centro Bahía Lomas de la Universidad Santo Tomás (UST), señaló que pueden existir dos impactos relevantes en la fauna de los ríos, al tratarse de proyectos de extracción de áridos.
"Hay dos impactos relevantes. El primero tiene que ver con la modificación del hábitat, ya que se erosiona la estructura del río y afecta los sitios de distribución de especies de animales", explicó.
Añadió que "están los grupos de insectos, moluscos y crustáceos, quienes pueden ser perjudicados".
Finalmente, señaló que "el otro impacto tiene que ver con la sedimentación, ya que al mover tanto material, libera sedimentos más livianos que puede haber en el lecho de río, afectando sus partes más bajas, como ocurre en el río Biobío, que tiene un problema severo en su lecho, lo que hace que su profundidad sea muy baja".
Sociedad civil
Pablo Muñoz, miembro de la Coordinadora Tomecina, señaló que han estado pendientes de los proyectos de extracción de áridos, especialmente el de la Cantera El Pellín.
"La gente que vive en los territorios se empieza a dar cuenta de manera más rápida de los impactos ambientales que generan estos proyectos de canteras, ya que son quienes viven ahí. A nosotros este tema nos toca, ya que está en el límite de Penco y Tomé", dijo.
No obstante, en términos generales, indicó que hay un gran problema. "Solo presentan una DIA para funcionar, sin ningún tipo de fiscalización, cuando se requeriría un Estudio de Impacto Ambiental como mínimo".
Finalmente, señaló que "las organizaciones medioambientales están cada vez más atentas a estas iniciativas, no solo a las más grandes como pueden ser las termoeléctricas o los gasoductos".
"Hay una concentración gigantesca en las regiones más industrializadas del país".
Claudio Valdovinos,, investigador Centro Eula
"Se les debiera exigir un estudio en vez de una declaración de impacto ambiental".
Pablo Muñoz,, Coordinadora Tomecina