Redacción

Bomberos y familiares de las víctimas participaron en una conmemoración y romería para recordar a los diez fallecidos que dejó en julio de 2006 un alud en el Cerro Manquimávida, en Chiguayante.

La actividad, encabezada por el alcalde José Antonio Rivas, se realizó la noche del martes en el sector de Valle La Piedra, donde hace 17 años se desencadenó una de las mayores tragedias de las que tiene memoria la comunidad, cuando las laderas del cerro cedieron ante las persistentes lluvias, provocando un deslizamiento de tierra, barro y piedras que costó la vida a tres voluntarios de Bomberos y siete vecinos aquel 11 de julio de 2006.

"Es una fecha muy triste, pero que nos reúne porque nuestros mártires merecen que rindamos honores y mantengamos viva su memoria y el legado de lo que significó su vida y espíritu bomberil, siempre al servicio del prójimo", dijo el alcalde Antonio Rivas

En el lugar, se rindió homenaje y honores a quienes fallecieron ese día, para lo cual se efectuó el tradicional toque de sirenas, y una romería al Cementerio de Chiguayante, donde se depositó una ofrenda floral y hubo sentidas palabras para Bomberos y familiares de las víctimas.

Un sujeto de 51 años fue detenido en la comuna de Curanilahue acusado de golpear y amenazar a su conviviente, de 44 años, a quien habría intimidado con un hacha y un rifle.

Según la información de la Cuarta Comisaría de Carabineros, el hecho ocurrió cerca de la medianoche. Al llegar personal uniformado al lugar, la mujer se encontraba en el exterior del domicilio y, según su relato a la policía, habría sido golpeada a combos y puntapiés en distintas partes de su cuerpo y que además habría sido amenazada de muerte.

Tras tomar conocimiento de dicha situación, Carabineros detuvo al individuo acusado por lesiones de diversa consideración e incautó el arma y el hacha con las que habría amenazado a la mujer, siendo puesto a disposición de la justicia.

El Gobierno Regional oficializó la entrega a la muni de Nacimiento de maquinaria consistente en una motoniveladora, un rodillo compactador, un carro de arrastre y una retroexcavadora, por casi $490 millones, lo que permitirá limpiar y despejar caminos en la zona rural de la comuna, una de las afectadas por los últimos incendios forestales.

"El municipio gestionó la solicitud de recursos y eso ha permitido que una fracción de las máquinas que están acá, hayan sido adquiridas con dinero regional para mantener los caminos, entrar a lugares donde hay derrumbes y así poder limpiarlos y habilitarlos, tanto para la vida cotidiana, como para saber reaccionar ante una emergencia", destacó el gobernador regional del Biobío, Rodrigo Díaz.

Tras la gestión de sus dirigentes y el apoyo del municipio, más de 500 familias lograron ser traspasadas a la jurisdicción de la Subcomisaría de Carabineros de Nonguén, dependencia que está mucho más cerca de sus hogares que la primera Comisaría, ubicada en el centro de Concepción, a la que tenían que acudir.

Mauricio Jara, presidente de la junta de vecinos Jardines de Collao y Los Queules, explicó que "para cualquier requerimiento teníamos que acudir a la Primera Comisaría de Carabineros, que está a 6,8 kilómetros de distancia de nuestras casas, mientras que la Subcomisaría de Nonguén está a 400 metros, incluso desde mi casa puedo ver la Subcomisaría".

Se destacó la respuesta positiva a la petición.