Cristian Aguayo Venegas

Con el expectante estreno del nuevo reality de Canal 13, Tierra Brava y el éxito rotundo que ha tenido Gran Hermano de Chilevisión, los formatos de telerrealidad han vuelto en gloria y majestad a la pantalla chica.

Asimismo, la aparición de nuevos rostros y la viralización de videos en redes sociales han despertado los recuerdos de antiguos jugadores penquistas, quienes también tuvieron la oportunidad de participar de encierros exitosos.

Uno de ellos es Philippe Trillat, ex participante de 40 ó 20 de Canal 13, quien hoy en día, se dedica a la pintura, algo que forjó en el programa.

"Mi paso por el formato reality fue una experiencia entretenida. Si miro para atrás ahora, pienso que era algo simpático, pero igual tuvo cosas difíciles", señaló.

"De alguna manera significó algo para mi. Era simpático ver a personajes tan distintos unos de los otros, viviendo en la misma casa, conviviendo, lo que es la esencia de un reality, pero además, en mi caso, intentando conquistar a alguien", comentó.

El formato del que habla Trillat consistía en que un grupo de hombres, de entre 40 y 20 años, tenía como objetivo "conquistar a una mujer".

"Ahí tuve la oportunidad de conocer rostros emergentes de ese tiempo que ahora están más consolidados en este tipo de formatos, como el Junior Playboy. Y también habían personas de todas las edades, como el Lolo Peña, entonces, era un mix bastante raro (risas)", dijo.

Sobre las complicaciones, Trillat comentó que "yo en ese tiempo trabajaba en televisión y nunca me pude despegar de la perspectiva que había cámaras, no era que estaba actuando como un personaje, pero no me pude desprender de eso".

"El encierro también, el cual podría haber sido más llevadero si es que lo hubiese estado pasando mejor. Yo no estaba pasándolo muy bien, de hecho, la mayor cantidad del tiempo de encierro lo llegué a consolidar en mi carrera en la pintura, porque estuve todo el tiempo pintando, era la manera de distraerme", detalló.

"Incluso, muchos años antes, tuve la oportunidad de entrar a Protagonistas de la Fama, un reality más enfocado en la actuación, pero no se dio", comentó.

No obstante, el penquista guarda gratos recuerdos. "Conocí al Junior, compartí con Eduardo Cruz Johnson, y también con otros compañeros, ya que igual se generan lazos mientras estás ahí. Quizás siento que debí jugar mucho más, ser como soy y no cuestionarse tantas cosas", relató.

Al ser consultado por la comparación con los realities actuales, el penquista indicó que "pensé que no iba a funcionar tan fuerte en Chile, pero claramente el público lo estaba disfrutando, sin embargo, es prácticamente lo mismo, sobre todo, porque siempre estarán los conflictos".

"granjeras"

Paulina Gaete, penquista que estuvo en el reality que sucedió a La Granja, también se refirió a su paso por la telerrealidad, la cual le dejó gratos recuerdos y una amistad que perdura hasta hoy.

"Fue super bonito. Si bien estuve en un reality extremo, porque es algo muy parecido a lo que van a pasar los que estarán en Tierra Brava, porque era una granja, teníamos que limpiar corrales, alimentar animales, a pesar de eso, fue una tremenda experiencia", afirmó.

"Al principio fue un poco chocante, porque uno viene de la ciudad, pero después ya una se va acostumbrando a la calma, a trabajar para alimentarse y sobrevivir", aseguró.

Sobre su experiencia, Paulina sostuvo que "me ayudó un montón, me abrió muchas puertas ya que después del reality pude viajar por todo el país haciendo desfiles, eventos, también estuve en discotecas, así que bien la verdad".

"Lo que más me costó fue acostumbrarme a cosas como el baño, el estarme bañando con las cámaras, eso era difícil, y la convivencia también, pero hice una buena amiga, Constanza Moya, que todavía seguimos super juntas. Y sobre las peleas, no tuve tantas, porque no es mi estilo", complementó a La Estrella.

-¿Sientes que hay diferencias entre realities antiguos y nuevos?

Creo que, cuando estábamos nosotros, era 100% la desconexión, yo no tenía ninguna comunicación con mi familia, nada. Ahora, los participantes firman cláusulas, y saben más cosas del exterior también.

"Pero si se conectan con los conflictos, ya que las emociones se exacerban dentro, porque estás encerrado con un grupo de gente que no conoces y no ves a nadie más, entonces, cualquier cosa se agranda. Y también está el voyeurismo de la gente, el saber quien peleó con quien, entonces, eso es lo que sigue de los realities", cerró.

"Sin embargo, es practicamente lo mismo, sobre todo, porque siempre estarán los conflictos".

Philippe Trillat,, sobre comparar realitys