"El caballero de la TV": así se recordó el legado de Enrique Maluenda
La chorera Tatiana Merino y el penquista Cachirupi se refirieron al gran animador con muschísimo cariño.
N.L.G.
"Hola, ¿qué tal? Festival", "Platita poca, pero segura", o "sígame camarita amiga", son algunas frases que Enrique Maluenda inmortalizó en la televisión chilena. Las mismas que ayer fueron recordadas después de que su hijo Rodrigo confirmara la noticia de que su padre había fallecido pasadas las 9:30 de la mañana, debido a diversos problemas de salud, especialmente hepáticos, que arrastraba desde hace meses, y que generaron pesar en diversas figuras de la televisión chilena al recordar su impacto y legado.
Maluenda, de 88 años, fue una figura televisiva no solo en el país, sino que, tras su primer trabajo televisivo con "De fiesta con los Flamingos" en 1962 con Canal 13, dio un giro internacional que primero lo llevó a Lima en Perú, donde estuvo cerca de un año y medio trabajando en radio para después animar en Panamericana Televisión "El hit de la 1", entre 1964 y 1968. Tras un paso por Puerto Rico, un regreso a Chile y otra salida a Puerto Rico en 1972, volvió cuatro años más tarde para encabezar "Dingolondango" y después el famoso y recordado "Festival de la una" entre 1979 y 1988, ambos programas en Televisión Nacional, este último recordado por uno de los históricos momentos de la TV local, con el fallido acto del Mago Oli, que casi se ahogó en un tanque con agua.
El actor Fernando Alarcón recordó a Mega que tras el regreso de Maluenda en 1976 la idea era competir con "Sábado Gigante", y reveló que con una sección de "Dingolondango", llamada "El copihue de oro", donde se le entregaba una serie de pruebas a una comunidad con el fin de obtener recursos económicos gracias a aportes de la gente, fue la génesis de lo que después sería la Teletón.
"La primera donación de esa sección fue de Don Francisco (Mario Kreutzberger) y después él reconoció que eso había sido la fuente de inspiración para la Teletón, por la generosidad de la gente".
Alarcón, además, definió a Maluenda como "el caballero de la televisión", elogios similares que expresó Leo Caprile. "Él buscó prestigio y lo consiguió, es un hombre de prestigio, no solo basta con llenarse de dinero. Hay que destacar esa mezcla de cultura, de fineza, de caballerosidad a todo límite, demuestra que con esos modales también educamos, enseñamos".
El féretro de Maluenda llegó ayer en la tarde a la Parroquia Nuestra Señora de las Mercedes en la comuna de Vitacura, donde era velado y hasta donde arribó Kreutzberger para darle el pésame a la familia. "Es un compañero, no solo lo conocía de la televisión, lo conocía personalmente. Estamos en este camino sobre las ocho décadas y bueno, uno va más adelante, otro más atrás en este teatro de la vida. Enrique no sólo trabajó en Chile, ya había sido conocido en Perú, posteriormente en Puerto Rico. Él tuvo una carrera internacional y nacional muy destacada, popularmente es muy querido y mucha gente lo va a acompañar".
Alfredo Lamadrid, en tanto, lo definió como "el animador por excelencia", y su hijo Rodrigo señaló que "nos dejó tranquilamente (...) creo que él no dimensionó lo que llegó a ser, era muy humilde".
De talcahuano
Tatiana Merino, oriunda de Talcahuano, escribió en sus redes sociales: "Que lamentable noticia. Tantos recuerdos de este gran amigo y profesional, el señor de la televisión chilena. Tantas giras, eventos y comidas. Gracias a ti conocí todo Chile y me presentaste ante todo el país. Estaré agradecida por siempre y siempre estarás en mis pensamientos. Siempre recuerdo la frase 'Poquita plata pero segura', pero también recuerdo lo generoso que eras y lo buen amigo. Un gran abrazo en estos momentos de dolor a toda su hermosa familia. Descansa en paz amigo mío.
Cachirupi
Juan Antonio Rojas "Cachirupi" comunicador de la Radio Punto 7 de Concepción dijo "se nos fue un grande, un maestro y caballero de las comunicaciones. Siempre fue muy correcto y era una persona que se manejaba muy bien en los eventos. Era un referente para todos nosotros que empezábamos tanto en la radio como la televisión. Dentro de los animadores nacionales era uno de los principales con su 'Festival de la una', dándoles espacio también a muchos artistas y humoristas jóvenes que estaban partiendo en esos años y se dieron a conocer con el programa".
Añadió que "eso fue fundamental y parte de su legado, porque muchos de ellos continúan en la primera línea.Otro aspecto muy rescatable es que hacía su programa todos los días, lo que era muy desgastante y lograba imponerse en el primer lugar. Eso fue gracias a su forma de comunicar y la cercanía con la gente. Es una enorme pérdida".
Puntualizó que "independiente que haya estado delicado de salud, nos impactó su muerte. Se sabía que estaba complicado, pero uno tenía la esperanza que se pudiera recuperar por el cariño. Si bien no compartí con él, siempre lo seguí a la distancia porque era un referente para nuestro trabajo.Como comunicadores todos sacamos algunas cosas de él para las animaciones en vivo. La cercanía que tenía con el público es algo en lo que siempre nos fijamos y copiamos en realidad. En esa época los animadores eran muy serios y estructurados, pero él hacía otras cosas como sacar un poco de salsa de tomate y probarla en pantalla. Era bastante espontáneo y distendido, pero a la vez muy correcto. Marcó una época".