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En Llico, la Unidad Alimentaria de la Delegación Arauco, realizó jornada de educación a manipuladores y manipuladoras en locales de alimentos, para entregar recomendaciones a la población sobre el consumo seguro de productos de mar y prevención

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Carabineros de la 1ª Comisaría de #Concepción detuvieron a 4 personas quienes perpetraban robos de objetos al interior de vehículos estacionados en el sector céntrico de la comuna. Los imputados fueron puestos a disposición del Ministerio Público para su control de detención.

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Más de 100 estudiantes UdeC protagonizarán Campaña 2023 del Programa de Familias de Acogida Especializada, motivando a acoger a niños y niñas al resguardo del Servicio de Protección a la Infancia y Adolescencia del Gobierno de Chile.

The Beatles y Bad Bunny, ¿qué tienen en común? Además de ser aclamados por multitudes, muy distintas, por cierto, comparten un tema que, hasta hace poco, no tenía mucho que ver con música: la inteligencia artificial (IA).

En el caso de The Beatles, gracias a IA se logró dar vida a una canción hasta ahora descartada, contenida en grabaciones en cassettes que Yoko Ono compartió, a inicios de los 90, a los tres Beatles vivos. Con la tecnología disponible entonces no fue posible rescatar la voz de John Lennon... lo que hoy sí se pudo.

Por otro lado, Bad Bunny se hizo viral por una canción en la que, a través del mismo tipo de tecnología, emula un trabajo de colaboración musical entre él y Justin Bieber, generando profunda molestia en el cantante. Es decir, una multitud celebra que Lennon vuelva a la vida, a casi 43 años de su triste muerte, mientras que la otra (al menos en la visión de Bad Bunny) lo halla "injusto".

Polémica aparte, esto plantea un punto interesante. La tecnología no es ni buena ni mala, sino que su uso puede dar más luz o más sombra. Así como en la nueva canción de The Beatles, a través de IA y aprendizaje de máquinas (machine learning) fueron capaces de resolver un problema de abstracción de sonidos ambiente, voz y piano, en el caso de la "no canción" de Bad Bunny el matiz es más bien negativo, con suplantación de identidad digital.

Ya hemos podido ver cómo se replican rostros con gestos y modulación, además de la voz, lo que podría hacernos pasar muchos malos ratos por la realización de actos maliciosos en nombre nuestro. No es descabellado imaginar a la IA en temas mucho más domésticos y rutinarios, por ejemplo, en el "teletrabajo", haciéndose pasar por una persona, o en la comisión de algún delito con la información que ésta pudiese llegar a manejar.

Más que asustarse, se debe ser precavido; poner atención en todo lo que publicamos, fotos, videos, audios, información laboral, entre otros tantos datos que compartimos en la red. Abramos nuevas discusiones sobre deberes, derechos y leyes digitales, que nos lleven a conductas más resguardadas.

Probablemente, en un tiempo más, así como aprendimos a validarnos con un usuario, contraseña, dedo o rostro, seguiremos avanzando en mecanismos de seguridad. De todas formas, si John Lennon logró resucitar 43 años después gracias a la IA, tan mala no es.

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