Presidente: "Es Chile entero el que sufre y llora a nuestros muertos"
Boric decretó duelo nacional ante el centenar de fallecidos que dejan los incendios en la Quinta Región, admitiendo que la cifra de víctimas crecerá. Baja en las temperaturas abre opción de apagar el fuego y catastrar a los damnificados.
Leo Riquelme
El Presidente Gabriel Boric decretó dos días de duelo nacional por las víctimas de los incendios en la región de Valparaíso que consumieron miles de viviendas principalmente en las comunas de Viña del Mar y Quilpué, y que hasta ayer le costaban la vida a 99 personas, según el SML. "Sabemos que esa cifra va a crecer significativamente", admitió el mandatario desde un albergue quilpueíno. "Es Chile entero el que sufre y llora a nuestros muertos", añadió.
En el municipio viñamarino sostienen que hay 350 personas reportadas como desaparecidas, pero el mandatario instruyó que el informe de fallecidos se canalice sólo a través del Servicio Médico Legal (SML), para el que se reforzó la dotación, al igual que las de peritos de la Brigada de Homicidios de la PDI y el Labocar de Carabineros.
Asimismo, Boric solicitó celeridad en las investigaciones sobre el origen de lo ocurrido, lo que resulta sospechoso por la gran cantidad de focos simultáneos que hubo.
Catástrofe
El Presidente aseguró que la tragedia de este fin de semana es la peor que afecta al país desde el terremoto de 2010, pues sólo en Quilpué el catastro existente hasta el sábado al mediodía arrojaba más de 1.300 viviendas destruidas, eso sin contar a Viña del Mar, donde en el Ejecutivo afirman que la catástrofe es aún peor.
"Es la tragedia más grande que hemos vivido como país desde el terremoto del 27-F", señaló el mandatario.
La falta de un dato consolidado sobre el nivel de la destrucción iniciada en la tarde del viernes fue justificado por las autoridades en las dificultades que aún existen para ingresar a zonas que fueron devastadas por las llamas.
Tras encabezar una reunión del Comité de Gestión del Riesgo de Desastres (Cogrid), la ministra del Interior, Carolina Tohá, dijo que el pronóstico de la Dirección Meteorológica apunta a que al menos hasta el martes la zona tenga mejores condiciones atmosféricas, con un descenso de las temperaturas y una vaguada costera que en las mañanas ofrecerá una humedad de hasta 90%.
La jefa de gabinete explicó que esto posibilitará "enfriar" los focos que aún se mantienen. Por las tardes, advirtió, volverá a hacer calor, pero en menores grados que los que se presentaron el viernes y sábado, lo que les abre la esperanza de poder controlar la emergencia.
Con estas mejores condiciones las autoridades esperan acelerar también la aplicación de las fichas sociales para gestionar apoyos, por lo que para hoy fue convocado el Comité de Ayudas Tempranas, para lo que el ministro de Hacienda, Mario Marcel, dijo que hay recursos disponibles y flexibilización en los trámites para que llegue lo antes posible a las víctimas.
Para la zona se instruyó la extensión del toque de queda para velar por la seguridad de los vecinos y el Presidente ordenó la apertura total del Palacio Presidencial Cerro Castillo para que se realicen actividades para niños y adolescentes afectados. "Tienen que tener un lugar donde estar y también contención emocional", dijo.
A medida que las llamas se apagaban y aunque mucho material aún estaba caliente, los damnificados ayer dedicaron gran parte del día a remover los escombros.
A los barrios completos arrasados en distintos puntos de Viña y Quilpué, ayer se confirmó la destrucción casi total de uno de los principales atractivos de la ciudad: el Jardín Botánico.