Matías Gatica Lindsay

Carabineros detuvo en la madrugada de ayer a tres presuntos involucrados en el asesinato de tres carabineros en Cañete. Un cuarto sospechoso huyó en medio del operativo y ayer estaba prófugo. Desde el Ministerio Público señalaron que los imputados habrían querido "robarles armas" y "atacarlos directamente".

Luego de tres meses de investigación, personal del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (Gope) de Carabineros llegó a eso de las 3:00 horas de ayer al sector Antiquina, en Cañete, y a Huechuraba, en la Región Metropolitana, para hacer cumplir cuatro órdenes de detención en contra de los presuntos involucrados en el asesinato de los uniformados Carlos Cisterna (43 años), Sergio Arévalo (34 años) y Misael Vidal (30 años).

El hecho ocurrió cerca de las 1:00 horas del sábado 27 de abril en la Ruta P72S, que conecta Tirúa y Cañete, donde los funcionarios iban a realizar un control de una reclusión domiciliaria. En ese momento fueron emboscados por un grupo de delincuentes, quienes los asesinaron y calcinaron sus cuerpos al interior de la misma patrulla policial en la que se movilizaban.

Tras el atentado, el fiscal regional de La Araucanía, Roberto Garrido, quien quedó a cargo de la indagatoria, señaló que sería una investigación "de largo aliento" para dar con los responsables de este triple homicidio.

De esta manera, tras dar con los presuntos responsables, Carabineros llegó con drones de visión nocturna y un nutrido piquete al sector Antiquina, donde detuvo a dos de los sospechosos del crimen tras varios allanamientos a domicilios; y a Huechuraba, donde logró capturar al tercer sospechoso.

En tanto, según detalló el persecutor Garrido, en el momento en que se realizaba el operativo en Cañete, un cuarto sospechoso huyó caminando descalzo y al cierre de esta edición era buscado por la policía. En el procedimiento se detuvo además a otras dos personas que no estarían vinculadas con este crimen.

Los detenidos son los hermanos Felipe Antihuen Santi (29), Yeferson Antihuen Santi (19), además de Nicolás Rivas Paillao (19), quienes pertenecerían a la orgánica Resistencia Mapuche Lavkenche.

Por su parte, el prófugo fue identificado como Tomás Antihuen Santi, de 22 años, quien al igual que sus hermanos Felipe y Yeferson son sobrinos de Carlos Antihuen Riquelme (37), imputado que estaba cumpliendo la cautelar de arresto domiciliario por infracción a las leyes de armas y de droga y que iba a ir a ser fiscalizado por los policías el día en que ocurrió el crimen. Pese a ello, Garrido dijo que de momento no hay antecedentes que involucren a ese último individuo con el triple homicidio.

"robo de armas"

Tras las detenciones el fiscal Garrido dijo que el operativo "fue bastante limpio y rápido" y agregó que la Fiscalía ha "reunido a esta altura una cantidad de antecedentes suficientes que nos permiten formular imputaciones en contra de las personas detenidas", quienes aseguró que "tienen antecedentes que nos permiten hacerlos presumiblemente partícipes en la acción que significa la muerte de los funcionarios de Carabineros".

A su vez, el fiscal dijo que el ataque contra los carabineros tuvo "una doble intención: uno es de hacerse con las armas que los funcionarios de Carabineros portaban; y otro, es atacar directamente a carabineros en relación con una de las personas imputadas". Añadió que uno de los acusados "ya tiene antecedentes por ataques directos a los funcionarios de carabineros".

Según La Tercera, que tuvo acceso al expediente, en el crimen los imputados habrían exigido a los policías arrodillarse, les quitaron los chalecos antibalas y los ejecutaron con disparos en la cabeza y en la espalda. Según el medio, un testigo protegido dijo que vio un video que mostraba a los uniformados llorando y suplicando para que no los mataran.

En cuanto a la relación entre los imputados, el fiscal Garrido dijo que los detenidos "son todos del mismo sector de Cañete, se mantuvieron en ese mismo lugar, cambiaron su rutina de manera notoria también desde nuestro punto de vista, sobre todo uno de ellos, el detenido que se fue a Santiago".

Con esos antecedentes los tres acusados pasaron ayer a control de detención en el Juzgado de Garantía de Cañete, donde el Ministerio Público solicitó ampliar la detención de los sospechosos debido a que surgieron nuevos antecedentes en los allanamientos, los que deberán ser analizados. La audiencia se realizará hoy a las 15:00 horas.

Otras autoridades

Tras conocerse la detención de los imputados, el Presidente Gabriel Boric dijo que "esto refuerza algo que yo creo que es muy importante, que el día que sucedió este vil asesinato, sin importar diferencias políticas, nos comprometimos a que todos los poderes del Estado (...) íbamos a perseguir y atrapar a los culpables".

"Ahora le toca su rol a la justicia, que es un poder independiente. Ellos tendrán que tomar las definiciones que correspondan, pero acá lo que puedo asegurarles es que se ha hecho un trabajo serio, responsable y que, como hemos dicho en otros casos, en Chile no hay impunidad (...) Es una demostración de la seriedad de nuestras instituciones", agregó Boric.

Por su parte el fiscal nacional, Ángel Valencia, sostuvo que el Ministerio Público tiene "pruebas sólidas" para demostrar la participación de los detenidos en el crimen.

El general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, señaló que "estamos contentos por el éxito de una investigación que no ha estado exenta de complejidades, pero que nuestros especialistas han sido capaces de sobrellevar y han liderado una investigación que hoy día nos da frutos, y podemos llevarle tranquilidad y justicia a sus familias (de los policías)".