foto denuncia
advierten del peligro con un neumático
En la esquina de las calles Cochrane con Castellón, cerca del centro de Concepción, fue robada la tapa de una cámara subterránea y para advertir de aquello fue puesto un neumático para evitar accidentes.
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foto denuncia
peligro en cochrane con salas
En la esquina de las calles Cochrane y Salas, a una cuadra de la Primera Comisaría de Carabineros de Concepción, la tapa de una caja metálica de aparatos electrónicos fue vandalizada. Eso representa un peligro.
imagen de la ciudad plaza puerto varas de hualpén
Un espacio público muy valorado por los vecinos es la Plaza Puerto Varas ubicada a un costado de la avenida Cristóbal Colón entre las calles Puerto Varas y Cañete.
¿Aturdidos o despiertos?
Según el evangelio de este domingo (Lc 21, 25-28. 34-36), hay dos maneras de estar en el mundo, de vivir la fe y de esperar al Señor: aturdidos o despiertos. El tiempo litúrgico del Adviento, que comenzamos este domingo, nos invita a estar vigilantes y a esperar la liberación que nos regala Jesús.
El aturdimiento, según el texto bíblico, proviene de los excesos, la embriaguez y las preocupaciones de la vida. Lo menos peligroso parece ser la embriaguez, que es pasajera, salvo -claro- que se convierta en alcoholismo. Más grave es el uso de drogas, que no solo aturden, sino que provocan euforia y placer transitorio de manera artificial, llevando luego a la persona a una experiencia alienante que causa deterioro y perdición.
Entre los excesos que aturden se encuentra, sin duda, el uso de los medios tecnológicos y las redes sociales, principalmente el celular. Este fenómeno abarca prácticamente a todas las generaciones y genera adicciones enfermizas. Si no, analícese usted mismo y revise cuán dependiente está del celular: ¿cuántas horas al día lo usa? ¿Cuántas veces descuida a los demás o se distrae por estar pegado a él?
En el ámbito educativo, es bastante común la opinión de que el avance de la tecnología no ha traído mejoras significativas en los aprendizajes. De hecho, el desarrollo de habilidades como el pensamiento crítico, la creatividad y el razonamiento se ha visto seriamente afectado. Más aún, esta dependencia tecnológica nos ha llevado a vivir más aislados, autocentrados y con dificultad para relacionarnos con los demás. Como señala el papa Francisco en Fratelli Tutti: "Nos hemos empachado de conexiones y hemos perdido el sabor de la fraternidad". Y recientemente, en abril pasado, el Papa les decía a los jóvenes de Venecia: "Dejen el teléfono y encuentren a la gente (…) no sean profesionales del teclear compulsivo, sino creadores de novedad".
Que las preocupaciones de la vida puedan aturdir resulta, sin duda, extraño, porque todos debemos ocuparnos legítimamente de muchas cosas: nuestra familia, nuestro trabajo, nuestros proyectos, etc. Pero hay formas de vivir que nos hacen daño, porque nos descentran de lo esencial y nos hacen perder una auténtica jerarquía de valores. Por eso la invitación del Señor: "Busquen primero el Reino de Dios y su justicia, y lo demás se les dará por añadidura" (Mt 6, 33).
Frente al aturdimiento, existe otra posibilidad. Jesús lo expresa con una hermosa imagen: "Cuando comience a suceder esto, tengan ánimo y levanten la cabeza". Es una invitación a elevar la mirada, a enderezarse, porque a menudo vivimos volcados únicamente hacia nosotros mismos, hacia el estrecho ámbito de nuestras preocupaciones y realidades. Hay que aprender a mirar a los demás y, sobre todo, a mirar a Dios, quien siempre abre horizontes más amplios en nuestra vida.
Esto no significa descuidarnos a nosotros mismos ni dejar de atender nuestras responsabilidades, pero lo importante será siempre hacerlo con perspectiva, desde una mirada integral de la vida que incorpore la presencia de Dios y de los demás en nuestro horizonte personal. Por eso, vale la pena escuchar a Jesús: "Tengan ánimo y levanten la cabeza, está por llegarles la liberación".
¡Qué hermosa perspectiva para este fin de año y para prepararnos para la Navidad!