Jorge Reyes Patuelli
Pep Guardiola ya no puede estar nunca tranquilo. Su equipo tenía la victoria ante el Manchester United en el bolsillo a los 88' y la regaló en dos acciones catastróficas, cayendo por 2-1 de local y empeorando aún más el momento de un Manchester City que arrastra la peor racha del catalán en la banca.
El City, que tenía el partido hecho gracias a un gol de Josko Gvardiol a los 36', lo perdió todo en los minutos finales. Matheus Nunes hizo un penal que convirtió en gol Bruno Fernandes a los 88', y Amad Diallo rubricó la remontada a los 90'.
El golpe para el técnico catalán fue duro. Es que la racha que acumula Pep Guardiola en los últimos duelos con el City ha sido derechamente para el olvido: de once partidos jugados, ha sumado dos empates, ocho derrotas y solamente una victoria. Además, lo hunde su rival histórico, pero al que estaba acostumbrado a derribar. De 23 clásicos de Manchester, Guardiola ha ganado trece, perdido dos y empatado ocho.
"Soy el jefe. Soy el entrenador. Tengo que encontrar una solución. No soy lo suficientemente bueno", dijo Pep a la BBC. "Es muy sencillo. No me va bien, esa es la verdad", agregó.
Siendo el Etihad, estadio de los citizens, consciente del mal momento que atraviesa su entrenador, le recibió con uno de los lienzos más significativos por parte de la hinchada. "Guardiola, més que un entrenador", rezó el mural con el que los aficionados del City trataron de levantar el ánimo comenzado el partido.
Y es que el City se aleja lentamente de la punta del torneo, quedando a nueve puntos del líder Liverpool, que eso sí, tiene un partido menos.
Lo llamativo es que Rubén Amorim, técnico del United, enfrentaba su primer clásico de la ciudad. Y lo ganó, transformándose en el primer entrenador desde Alex Ferguson en ganar en su debut en el partido más importante de Manchester. "Creo que lo merecíamos. Fue un partido muy duro, pero creímos hasta el final. Conseguimos marcar, necesitábamos esa victoria, era importante para nosotros y para nuestra afición", dijo terminado el partido.