415 pymes golpeadas por incendios se ponen de pie con fondo Sercotec
Servicio anunció nuevos planes para zona siniestrada en 2024 y familia cervecera que lo perdió habla de su reconstrucción.
Matías Gatica Lindsay
El Servicio de Cooperación Técnica (Sercotec) y el Gobierno Regional de Valparaíso lanzaron dos nuevos programas para ir en ayudar a la recuperación y la reactivación de comercios que se vieron afectados por los fatídicos incendios ocurrido en febrero de 2024 en la Región de Valparaíso.
Estos dos fondos, para los que se dispondrá de un presupuesto de $200 millones, se denominan "Recuperación de barrios comerciales" y "Apoyo productivo a ferias libres". En el primero de ellos, se otorgará financiamiento no reembolsable para que micro y pequeñas empresas puedan ejecutar un plan de actividades formulado participativamente, con énfasis en el fortalecimiento de la seguridad y la asociatividad.
Los beneficiados, que pueden postular hasta el jueves contarán con un gestor que los acompañará. En tanto la convocatoria contempla un subsidio por barrio de hasta $20 millones y tiene una cobertura estimada de cinco barrios comerciales a beneficiar, conformados cada uno por un mínimo de 15 empresas.
Por su parte, el programa "Apoyo a la reactivación de ferias libres" tiene como objetivo recuperar la competitividad de ferias afectadas por el mega incendio mediante el apoyo a organizaciones o agrupaciones de empresas con personalidad jurídica, entregando un financiamiento no reembolsable de $10 millones por organización, con una cobertura estimada de cuatro ferias a beneficiar.
"Es un trabajo que finalmente trae frutos colectivos, no solamente para los dueños de estos emprendimientos, sino también para toda su comunidad que goza de poder retomar parte de lo que era su vida (...) Es de la vida de los vecinos y vecinas de Viña del Mar, de Quilpué y de Villa Alemana", dijo la seremi de Gobierno de Valparaíso, María Fernanda Moraga.
La gerenta general de Sercotec, María José Becerra dijo que "nos honra decir que cumplimos. Frente a la tragedia, desde la primera semana nos pusimos a disposición de la recuperación y hemos logrado cumplir al 100% el compromiso que hicimos de contribuir a la reactivación de las mipymes afectadas. Fue una inversión pública productiva de $3.786 millones que realizamos el año pasado, con los que pudimos beneficiar a 415 micro y pequeñas empresas, cooperativas, y también medianas empresas, con un subsidio no reembolsable de hasta $10 millones".
Para el programa de 2024 se hizo un catastro en las zonas afectadas por los incendios de la región, de donde salió el listado de pymes beneficiarias con sus respectivos grados de afectación económica, por lo que no fue necesario hacer una convocatoria abierta ni un proceso concursal.
Recordar es triste
Entre los negocios que se beneficiaron de los programas de 2024 está el de Misael Rivera, un hombre que hace más de 50 años tenía un minimarket en Achupallas, el que quedó completamente destruido por el incendio, en el que también perdió la vida su hermano. Al tiempo, el comerciante compró con container para abrir nuevamente su negocio y gracias al programa adquirió una sobadora de masa, un horno y mercadería.
También está el caso de María Jessica Cifuentes, una bioquímica que junto a su esposo tienen una cervecería llamada "Horus" en Viña del Mar. Ella contó a este medio como se está reponiendo del golpe de perder gran parte de su negocio por las llamas.
María Jessica relató que su negocio arrancó en 2012 produciendo 20 litros de cerveza, los que a 2018 aumentaron y ya estaban vendiendo 900 litros mensuales, los que luego pasaron a ser 2.700 litros en 2023.
"Eso se vendía todo, y estábamos invirtiendo en agrandar el espacio y comprar más equipos. Nos estaba yendo bien", aseguró.
Todos los planes se vieron frustrados con el incendio.
"Recordar el 2 de febrero es muy triste, aprieta el corazón y hay una cicatriz abierta. La vivencia fue muy extrema. Nosotros donde teníamos nuestra empresa era donde vivíamos. Fue un día muy caluroso y decidimos no salir ese día (...) fue todo tan rápido, estábamos con nuestros hijos y vimos una nube de humo muy extensa y en un momento comenzaron a caer cenizas y chispas y un viento huracanado. Mi hermana vino a buscar a sus hijos y yo me di cuenta que ese viento ya eran ráfagas y yo atiné a entrar a mis perritas. Cuando fui a buscarlas tuve que pasar entre las chispas y me desesperé, entré y mi esposo me gritaba: '¡Mari, vámonos, vámonos!", señaló.
"Dejé a los perritos acostados, yo le dije a mi esposo que no quería dejar a los gatos y los perros juntos porque podían pelear, yo les dejé agua y comida porque en mi cabeza yo decía que iba a poder volver cuando pudiera respirar. Luego de eso salí y no pensé más en mis perritas y ahora me arrepiento, mis perritas murieron en el incendio. Yo salí y me quemé en un glúteo y los brazos, agarré mi vehículo y me fui. Sentía el fuego en mi espalda y veía a todos los vecinos desesperados. Mi esposo me mandó un audio y me dijo que se quemó todo, la casa y la cervecería", recuerda.
La familia fue una de las beneficiadas con recursos del Sercotec, lo que la microempresaria explica así: "Para recuperarme estoy volviendo a levantar mi cervecería, la que quedó destruida completamente. Tuvimos que invertir nuevamente, podríamos haber cambiado el rumbo, podríamos haber hecho otra cosa, pero es algo que nos apasiona. Y ahora tenemos un proyecto súper ambicioso (...) queremos ser una empresa típica de Viña del Mar. Estamos trabajando con la municipalidad para sacar permisos y ya estamos produciendo, lo que es un gran logro".